El Mallorca se desata

Desde el principio los locales dejaron constancia de sus intenciones y se hicieron con el mando del encuentro. La primera ventaja considerable (11-2 a 6:18 para el final del primer cuarto) suponía un alivio y, sobre todo, una dosis de moral para seguir afianzando la superioridad en la pista. Un triple de Bivià colocaba el 26-11 en el marcador a falta de 2:23 para la conclusión de los primeros diez minutos en los que los locales incluso tuvieron momentos para lucirse.

El segundo cuarto arrancó con la misma tónica y con un quinteto íntegramente balear en pista. Riera, Pampín, Sastre, Alzamora y Orfila mantuvieron el tipo, aunque el Bàsquet Mallorca empezó a mostrarse algo espeso para atacar la zona de un Illescas apoyado en la solvencia de Joe Alonso. Blanch rompió la dinámica con un triple y permitió que los isleños siguieran disfrutando de una ventaja por encima de la barrera psicológica de los diez puntos casi hasta el descanso, al que se llegó con 43-32.

Otro triple de Banch en la primera acción del tercer cuarto mantuvo la intensidad en el grupo de Xavi Sastre hasta tal punto que el Bàsquet Mallorca llegó a los 18 puntos de máxima tras sólo dos minutos del tercer parcial. El Illescas, siempre a remolque, tiraba de ganas para intentar frenar a un conjunto local que supo mantener la regularidad anotadora y la intensidad defensiva para encarar el último cuarto con 15 puntos de renta (66-51).

Cuando todo apuntaba al desfile militar del Bàsquet Mallorca los locales se metieron en un lío. Los visitantes apretaron los dientes y un triple de Juanín López dejó la diferencia en 7 puntos a falta de 5:41 para la conclusión. Blair volvió a exhibir sus galones y prolongó su gran momento de forma para liderar la resistencia isleña. El Bàsquet Mallorca volvió a poner tierra de por medio de inmediato y no dio opciones en la pintura para rubricar su tercer triunfo de la temporada y el segundo consecutivo.