El Gobierno israelí, que rechaza tajantemente cualquier negociación, no ha reaccionado hasta el momento al ultimátum de las organizaciones palestinas.
Los tres grupos responsables del ataque a una base militar israelí al sur de Gaza, el brazo armado de Hamás, los Comités Populares de la Resistencia y el Ejército Islámico, dijeron que si no reciben respuesta de Israel antes de la hora límite, considerarán el secuestro de Shalit «caso cerrado».
El comunicado dice dar a Israel «una última oportunidad» y exige como condición principal la excarcelación de todas las mujeres y menores de edad palestinos presos en cárceles israelíes. «Si el enemigo no responde a nuestras exigencias humanitarias... entonces consideraremos el caso cerrado», refiere el comunicado. Los tres grupos habían exigido previamente en otro documento la liberación de mil prisioneros en Israel a cambio de la liberación de Shalit.
La Oficina del Primer Ministro israelí, Ehud Olmert, ha indicado no conocer los detalles del ultimátum dado por los grupos palestinos. La postura oficial de Israel es la de no «negociar con terroristas». No obstante, según el diario «Haaretz», los organismos de seguridad israelíes están preparados para excarcelar a presos palestinos que no estén implicados en delitos de sangre o actividades terroristas, en caso de alcanzarse un acuerdo con Hamás para la liberación de Shalit.
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