Un tribunal revoca la sentencia del único condenado por el atentado de Omagh

Murphy fue hallado culpable de participar en la conspiración para perpetrar el atentado del 15 de agosto de 1998, en el que murieron 29 personas, dos de ellas españolas, y más de 200 resultaron heridas. El juez instructor, Nicholas Kearns, afirmó ayer que la sentencia impuesta hace tres años es «dudosa», pues cuestionó la validez de las pruebas presentas entonces por la fiscalía.

Kearns aludió a la supuesta manipulación de las notas tomadas por dos agentes de la Garda (Policía irlandesa) durante los interrogatorios de Murphy y a los testimonios de éstos durante el primer juicio. También denunció que el anterior tribunal «violó» la presunción de inocencia del condenado cuando consideró sus sentencias previas para llegar a emitir un veredicto.

Los magistrados consideraron probado en aquel juicio que el constructor había prestado dos de sus teléfonos móviles a los autores materiales del ataque, del que se responsabilizó un grupo disidente del Ejército Republicano Irlandés (IRA), el IRA Auténtico, que se opone al proceso de paz. Murphy permanecerá en libertad bajo fianza de 85.000 euros hasta la celebración de un nuevo juicio, cuya fecha no ha sido aún fijada.

El presunto terrorista también tiene pendiente una demanda civil presentada por los familiares del atentado de Omagh en el Tribunal Superior de Belfast con el fin de obtener una indemnización de quince millones de euros. El Grupo de Acción Civil de Omagh cree que los autores del atentado fueron, además de Murphy, Seamus Daly, Liam Campbell, Michael McKevitt y Seamus McKenna. Michael McKevitt fue sentenciado en agosto de 2003 a veinte años de cárcel por dirigir durante un año las actividades del IRA Auténtico, pero no se llegó a vincularlo con Omagh.