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EFE-ESTOCOLMO El grupo de telecomunicaciones sueco Ericsson se propone suprimir unos 10.000 puestos de trabajo en el 2002, a los que podrían seguir otros tantos al año siguiente, como consecuencia de nuevas pérdidas del grupo anunciadas ayer. El presidente de Ericsson, Kurt Hellstroem, anunció esta nueva reducción ayer, en declaraciones a la radio sueca, y dijo que aproximadamente la mitad de la plantilla que se suprimirá este año corresponderá a trabajadores suecos. De persistir la mala situación económica, el grupo podría reducir su personal en entre 7.000 y 10.000 empleados más en el 2003.

Ericsson, cuya plantilla en todo el mundo es de unos 82.000 empleados, registró en el primer trimestre unas pérdidas antes de impuestos del orden de 5.400 millones de coronas (unos 644 millones de euros, 579 millones de dólares), respecto a los 4.900 millones de coronas (unos 584 millones de euros) del mismo periodo del 2001. Asimismo, el volumen de facturación descendió en un 40 por ciento, para colocarse en 41.900 millones de coronas (unos 5.000 millones de euros). Según cálculos del grupo, no es de prever una rápida recuperación del mercado, ya que se estima que la mala situación persistirá hasta entrado el 2003, como consecuencia de la debilidad del sector a nivel internacional. Pese a todo, Ericsson se propone salir de la zona de los números rojos y obtener de nuevo beneficios el próximo año.

Tras el anuncio de la reducción de plantilla, las acciones de la compañía sufrieron una caída en las cotizaciones de la Bolsa de Estocolmo de entre 30 y el 30.5 por ciento. La filial española de la multinacional sueca Ericsson, estima que en España «la mayor parte del ajuste ya está hecho», por lo que se espera que el nuevo recorte de plantilla no tenga mucha repercusión. Según explicaron fuentes de la compañía, aún es «muy pronto» para valorar y conocer los detalles del anuncio realizado ayer por Ericcson durante la presentación de sus resultados correspondientes al primer trimestre.

En cualquier caso, se recuerda que actualmente Ericsson España, que cuenta con una plantilla de 3.000 personas, está tramitando un expediente de regulación de empleo que afecta a 450 trabajadores. Además, se prevé que los futuros recortes se centrarán en áreas de producción y fabricación, que la compañía ha ido externalizando en España en los últimos años. A finales del pasado mes de octubre, Ericsson España anunció una reestructuración de su plantilla y sus actividades, consistente en suprimir 300 puestos de trabajo y reorganizar su actividad. Esta reducción de plantilla afectó especialmente a las áreas Comerciales y de Soporte.