TW
0
EFE-KABUL El presidente provisional de Afganistán, Burhanudín Rabani, prometió ayer que sus tropas de la Alianza del Norte tratarán bien a los prisioneros extranjeros que combaten junto a los talibanes en Kunduz (norte) y Kandahar, y no descartó la participación de talibanes en los futuros órganos de decisión afganos. Asimismo, aseguró en conferencia de prensa que una mujer, llamada Amina Afzalí, formará parte de la delegación gubernamental que se reunirá a partir de mañana en Bonn.

En cuanto a entregar el Gobierno a una autoridad provisional, Rabani dijo que está dispuesto a hacerlo si esa autoridad es efectivamente constituida -lo que debería hacerse en Bonn- y luego refrendada por la Loya Jirga o asamblea de notables.

El jefe de la Alianza del Norte no descartó que los talibanes «que no tengan crímenes» en su haber y «si los elige el pueblo» puedan formar parte de esos futuros órganos de decisión. Los talibanes «no como organización sino individualmente, no veo razón para que no participen en el proceso de paz», dijo.
La conferencia de prensa, primera que convoca Rabani desde que el 13 de noviembre Kabul cayó en manos de la Alianza del Norte y su brazo político, el Frente Unido, estuvo dedicada casi íntegramente a desmentir la «propaganda incorrecta de los medios» de comunicación sobre los malos tratos y matanzas de los voluntarios extranjeros que combaten a la Alianza, y que parecen ser quienes más duro combaten en el frente de Kunduz (norte).