TW
0
SAUD NAIM - NAPLUSA El líder palestino Yaser Arafat desafió ayer al comandante de las fuerzas armadas de Israel, general Shaúl Mofaz, en una arenga ante sus seguidores y advirtió a su pueblo que está ante lo que calificó de «semanas cruciales». Arafat, que arengó a simpatizantes de su movimiento Al Fatah, el principal de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), anunció que «al fin de unas pocas semanas» proclamará un Estado independiente en Cisjordania y Gaza con capital en Jerusalén La prensa israelí atribuyó recientemente al general Mofaz haber afirmado que si estalla un alzamiento palestino en Cisjordania y Gaza, sus efectivos lo aplastarán con tanques y aviones. Los encargados de la seguridad israelí creen que el alzamiento puede producirse si encallan las negociaciones de paz con la Autoridad Nacional Palestina (ANP), que se llevan a cabo dentro del mayor secreto, lo que ha dado lugar a casi diarias conjeturas de prensa acerca de los «planes de paz» de unos y otros.


En el acuerdo interino de Sharm el-Sheij de setiembre pasado, Arafat y el primer ministro israelí, Ehud Barak convinieron en terminar el proceso de paz -que comenzó en 1993- el próximo 13 de setiembre con un tratado que incluya un estatuto político definitivo para tres millones de palestinos en Cisjordania y Gaza, la mayoría de ellos ya bajo régimen de la ANP. El líder palestino no explicó a los activistas de Al Fatah si ha resuelto anticipar la proclamación del Estado independiente en esos territorios antes de que se cumpla el plazo de Sharm el-Sheij, ni por qué anunció que lo establecerá «dentro de pocas semanas».

Barak por su parte desmintió que hubiera hecho ofrecimientos a Arafat para avanzar en el difícil y lento proceso de paz, pero confió ayer de manera críptica a sus ministros que las negociaciones con los palestinos «han subido un escalón».