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TAGUIR SALÀYEV - NAZRÀN El mando militar ruso se reunió hoy para analizar la situación y precisar sus planes en Chechenia, donde la guerra de guerrillas del los islámicas ofrece una fiera resistencia a las unidades federales. Los jefes de todos los frentes se dieron cita en la base militar de Mozdok, Osetia del Norte, informó el comandante del frente oeste de la agrupación militar rusa que actúa en Chechenia, el general Vladímir Shamánov.

«Tras la reunión, plantearemos las nuevas tareas a nuestros subordinados», declaró Shamánov, quien señaló que lo más probable es que no se produzcan modificaciones en la «línea general de la operación terrorista», como denomina el Kremlin la guerra de Chechenia. El jefe militar se quejó de que las malas condiciones del tiempo reinantes en el Cáucaso Norte, donde la visibilidad en las zonas montañosas es de poco más de 50 metros, impide el empleo eficaz de las tropas de tierra y la aviación.

Según Shamánov, unos 2.000 guerrilleros hacen frente a las tropas rusas en las montañas del sur de la república rebelde, donde se encuentran las principales bases chechenas. Mientras, los separatistas denunciaron ayer que unos 700 civiles chechenes fueron ejecutados en los campos de concentración creados por el Ejército ruso en el territorio bajo su control.

Abú Movsáyev, jefe del contraespionaje chechén, dijo que la guerrilla dispone de «pruebas contundentes» del funcionamiento de campos de concentración en los distritos Shelkovskói y Naúrski, en «territorios ocupados» del norte de Chechenia. Un portavoz del Ministerio de Defensa de Rusia desmintió la acusación de los rebeldes, que calificó como «otra intoxicación de los bandidos llamada a engañar a Occidente».

En el decimotercer día de la batalla de Grozni, el mando ruso dijo que sus tropas mataron a 150 guerrilleros, y los separatistas anunciaron la muerte de más de 200 soldados federales, pero cada bando sólo reconoció contadas bajas en sus propias filas. Según los datos oficiales de Moscú, cuya veracidad es cuestionada por organismos no gubernamentales, las bajas rusas en Chechenia suman 585 muertos y 1.908 heridos.