Los cuatro ciudadanos españoles que fueron secuestrados en un avión
indio y que el viernes fueron liberados junto con el resto del
pasaje aseguraron ayer que se encuentran bien y con ganas de volver
a casa. Dos de los rehenes, Anna Lloret y Carlos Nelson Falcione,
explicaron la dureza del secuestro y se mostraron agradecidos por
las iniciativas diplomáticas para acabar con la crisis de una
manera negociada.
Anna Lloret, integrante junto con José Mayoral de la pareja de
Mollerussa, ha comentado que todavía está muy confusa pero que se
ha sentido reconfortada por la acogida que ha recibido. Carlos
Nelson Falcione, secuestrado junto con su compañera Victoria
Moreno, indicó, por su parte, que el secuestro «no ha sido nada
agradable y ahora sólo pretendemos que pase el tiempo pronto y
poder olvidar y sacar lo positivo de esta desagradable
experiencia».
Los cuatro españoles pasaron la noche de Fin de Año en la
residencia del Embajador español en Nueva Delhi, donde ayer pasaron
una revisión médica.
El secuestro del avión de Indian Airlines terminó el viernes en el
aeropuerto de Kandahar, en el sur de Afganistán, tras la marcha de
los cinco secuestradores que desviaron el aparato hace una semana y
la liberación de los 160 pasajeros del Airbus A-300, que se
encuentran ya en Nueva Delhi. Un avión de una aerolínea india
despegó de Kandahar rumbo a India, llevando a bordo a los rehenes
liberados. «Los pasajeros parecían todos sumamente agotados»,
indicó un responsable afgano.
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