El presidente iraquí Sadam Husein dijo ayer que Irak no retrocederá
frente a los ataques conjuntos de Estados Unidos y Gran Bretaña.
«Por Dios, no cederemos», dijo Sadam. El presidente de Irak, en un
mensaje dirigido a la nación, pidió a su pueblo que «siga
resistiendo a la agresión».
Sadam Husein, vestido con uniforme militar, calificó a Estados
Unidos y el Reino Unido de «demonios» y afirmó: «No favoreceré la
injusticia en contra de la justicia». En cualquier caso, manifestó
su convencimiento de que Irak «obtendrá la victoria contra los
agresores», por lo que «no habrá rendición ni admitiremos más
compromisos a costa de nuestros derechos».
Este el primer mensaje dirigido a los iraquíes por Sadam Husein.
Pocos minutos después, se difundió un comunicado del Mando General
de las Fuerzas Armadas, en el que se afirma que, de los misiles
lanzados sobre Irak por los estadounidenses y británicos (305 según
el Pentágono), sus defensas antiaéreas han derribado 77.
El viceprimer ministro iraquí Tarek Aziz aseguró que «atacaron
el Ministerio de Defensa, que es uno de los monumentos de Bagdad,
donde sólo hay algunos departamentos administrativos», y aseguró
que los expertos en desarme de la ONU lo inspeccionaron varias
veces. «Han destruido» este Ministerio, además de hospitales
cercanos, continuó Aziz. «Atacaron palacios presidenciales, casas
de huéspedes construidas por los iraquíes; sólo quieren destruir
estos bellos edificios», apuntó.
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