En medio de todo ello surge una nueva agrupación de electores con marca ‘Vent de Galilea’ (AEVDG) con el objetivo, según reflejan en su programa, de conseguir un representante en el Ajuntament para mejorar el núcleo con una serie de propuestas. La ruptura entre el PSOE y los Independents en 2015 una semana antes de las elecciones y el gobierno en minoría de Independents con apoyos puntuales del PP provocó que en 2019 los socialistas, desde la oposición, consiguieran la mayoría absoluta.
Antoni Marí logró ser alcalde y hizo bueno el refrán de a la tercera va la vencida. Durante toda esta legislatura han pesado más los trabajos de gestión y la parte administrativa para, según dice, arreglar el «caos» dejado por el anterior gobierno. Ahora afronta un reto muy importante que es revalidar la mayoría absoluta ya que parece ser que es la única opción para gobernar. Pese a ello desde el PSOE no se cierra las puertas a nadie y en caso de minorías se luchará para lograr acuerdos.
En el otro lado se encuentran los IPG, con Macu Riera al frente, portavoz actual, tras renunciar Biel Ferrà. En las elecciones de 2019 perdieron 29 votos pero ello supuso dos regidores menos. Ahora tienen el reto de recuperar terreno para volver al gobierno ya sea a través de una mayoría absoluta o con el apoyo de los ‘populares’. No parece que hayan cambiado demasiado las cosas y un gobierno entre PSOE y IPG-Més parece lejano. Pero nada está escrito y las urnas siempre tienen la última palabra.
El PP presenta a Margarita Martorell que ha sido regidora (aunque iba de número 3) tras dimitir el número 1. También perdió un regidor en 2019 y ahora apuesta por un cambio. La gran incógnita de estas elecciones es la nueva agrupación de electores de Galilea cuyo candidato,Lluis Bonet, se presentó en las pasadas elecciones con los Independents. De conseguir un regidor veremos con quien pacta.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.