Julio y agosto serán excelentes, pero mayo y junio han sido desiguales y a día de hoy es demasiado pronto para saber cómo irán septiembre y octubre. Foto: Miquel Àngel Cañellas | miquel angel canellas

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La alegría es generalizada. La temporada será buena puesto que, mayoritariamente, las ocupaciones son buenas y han conseguido incrementarse los precios. Eso sí, no será espléndida. Los presidentes de las diferentes asociaciones hoteleras de Mallorca consideran que julio y agosto serán excelentes, pero mayo y junio han sido desiguales y a día de hoy es demasiado pronto para saber cómo irán septiembre y octubre. En todo caso, ni todos los establecimientos ni todas las zonas hoteleras son iguales.

El incremento de los precios en este 2023 oscila entre el 5% y el 10% en la mayoría de zonas, pero hay coincidencia en señalar que no compensa la subida de los costes provocada por la inflación. A esto se le une el hecho de que no están entrando tantas reservas de último minuto como se esperaban. La recesión en Alemania o la complicada situación económica del Reino Unido y otros mercados emisores, así como el aumento del precio de los vuelos, podrían estar afectando a la decisión de viajar. De esta manera, aunque en menor medida que en años anteriores, algunos hoteles han optado por hacer ofertas para subir la ocupación.

La inflación, el alto nivel de burocracia y la falta de personal son problemas compartidos. Sobre la masificación, hay opiniones diversas. Algunos consideran que se debe luchar contra ella, mientras que otros piden mejorar la gestión de los flujos. Varios presidentes exigen que se haga más promoción turística. Y respecto a la moratoria de plazas turísticas, son numerosos los que prefieren no pronunciarse, mientras que varios presidentes consideran que se debería eliminar. Algunos de ellos consideran que no hacen falta más plazas o que, en todo caso, debe ser una decisión estudiada y acordada.

Miquel Artigues, presidente de la Asociación de Agroturismos, asegura que el inicio de la temporada ha sido bueno y que las perspectivas para el futuro más inmediato son excelentes. «La temporada ha tenido un gran inicio, aunque a principios de julio se ha producido un pequeño descenso. Las perspectivas para el mes de agosto son excelentes. Superararemos el 85% de ocupación y septiembre y octubre también seran meses muy buenos», explica Artigues. En todo caso, el presidente de la Asociación de Agroturismos recuerda que las reservas son ahora de último minuto. «La pandemia ha provocado la práctica desaparición de las reservas anticipadas, como las conocíamos años atrás. Ahora, son de último minuto o llegan con poca antelación», significa. Artigues reconoce que las perspectivas apuntan también que, como cada año, «cerraremos la práctica totalidad de los agroturismos la primera semana de noviembre». Respecto a los precios, Artigues apunta a un incremento del 15% respecto al año anterior, aunque matiza que no ha sido suficiente para compensar el incremento de los costes provocado por la inflación.

Respecto al nuevo Govern, Artigues les pide ‘seny’. «Les pediría que tengan ‘seny’. La junta directiva de la Asociación se reunirá y pediremos una audiencia a Marga Prohens para exponer nuestra visión del turismo. Nos gustaría que si ha de realizar algún cambio normativo nos tengan en consideración», significa. Finalmente, el presidente de los Agroturismos considera que debe lucharse contra la masificación. «Es evidente que debemos luchar contra la masificación. El territorio es limitado y a la larga puede ser muy perjudicial para el turismo», acaba explicando.

Pepe Luna, presidente de la Associació Hotelera de Platja de Muro, indica que las perspectivas para la temporada son positivas y se muestra contento por el cambio de Govern. «Tenemos una ocupación media del 95%, como en 2019, con precios entre un 25% y un 40% superiores con respecto a 2019. Incluso algunos hoteles tienen overbooking. Desde el inicio de temporada hemos tenido ocupaciones por encima del 85%», señala.

Luna es directo hablando de la situación política. «Estamos muy contentos con el cambio de Govern. El anterior Govern provocaba la masificación. No han invertido en alargar la autopista ni en el segundo cinturón. Ha calado el mensaje antiturístico. Las políticas que hemos sufrido han sido nefastas», comenta. «Del nuevo Govern esperamos que gestionen bien. Que estén a favor del turismo, que hagan promoción, que gestionen los flujos, que hagan infraestructuras y reformas de embellecimiento y que mejoren la calidad», señala. En concreto, está a favor de que se alargue la autopista hasta Alcúdia y se acabe el segundo cinturón. También es partidario de hacer un tren hasta Alcúdia, pero está en contra del tranvía actual al aeropuerto. «Queremos un tranvía, pero que esté bien hecho», señala, al mismo tiempo que pide que se liberalice el sector del taxi y que se aumenten las frecuencias de bus entre Muro y el puerto de Alcúdia. Por otra parte, el presidente de la Associació Hotelera de Platja de Muro considera que hay que quitar la moratoria y establecer la bolsa de plazas tal y como estaba. «La bolsa de plazas no aumenta», indica.

Pablo Riera-Marsá, que preside las asociaciones hoteleras de Alcúdia y Can Picafort, asegura que las aperturas se consiguieron adelantar y que la temporada es más que buena. «Este año hemos conseguido adelantar la fecha de apertura. Los dos primeros meses han sido muy buenos, pero ahora se ha normalizado la situación. En todo caso, las previsiones son buenas y confía en conseguir una ocupación de más del 90% en julio y agosto», indica.

Riera-Marsá explica también que las ventas de último minuto han perdido fuerza. «Las ventas de último minuto eran, tradicionalmente, a muy buen precio, pero este año van a la baja debido, entre otras razones, por el alto coste de los vuelos», explica. Respecto a septiembre y octubre, el presidente de las asociaciones de Alcúdia y Can Picafort explica que están por debajo de las previsiones. «Queda mucho, pero se están ralentizando un poco. No podemos descartar que sea consecuencia de la situación económica de algunos países emisores. En este sentido, Alemania, por ejemplo, ha entrado en recesión. La alegría pospandemia ha desaparecido», argumenta.

Finalmente, asegura que se han aumentado precios, especialmente en los servicios. «Hemos conseguido aumentar los precios, pero no lo suficiente como para compensar el incremento de costes provocado por la inflación. La facturación será excelente; la ocupación, muy buena; pero los resultados no igualarán los de años anteriores», indica. Finalmente, Riera-Marsá solicitaría al nuevo Govern que se mantenga siempre «en escucha activa y tenga una actitud de colaboración con el sector».

El presidente de la Asociación Hotelera de Camp de Mar, Port d’Andratx y Sant Elm, Bernat Jofre, asegura que la temporada comenzó bien, experimentó un parón en junio y augura que julio y agosto, como casi siempre, serán meses excelentes. «La temporada comenzó muy bien, pero sufrió un retroceso en junio. Julio y agosto, como siempre, serán meses excelentes. Otra cosa son septiembre y octubre, puesto que de momento las previsiones no acaban de ser buenas. Quizás el incremento de precios ha sido excesivo y, además, estamos notando que algunos mercados emisores no tienen una buena situación económica», significa.

En este sentido, incide en el hecho de que los establecimientos de lujo sufren menos. «Los hoteles de lujo no sufren tanto como el resto. Además, hay que considerar que Palma y la Platja de Palma, por sus características, consiguen excelentes ocupaciones a buenos precios. Son una isla dentro de una isla. El resto, somos otra cosa», indica. Finalmente, Jofre solicitaría al nuevo Govern que antes de adoptar cualquier medida decida cómo queremos las Balears del futuro. «En primer lugar, es necesario reducir y, si es posible, eliminar las trabas burocráticas. Hay que pensar en recuperar la bolsa de plazas, pero en primer lugar es indispensable pensar cómo queremos las Balears del futuro. Hay que tener perspectiva y visualizar las Islas del mañana», señala.

Gori Bonet, presidente de la Asociación Hotelera de la Colònia de Sant Jordi, explica que la temporada comenzó de forma extraña, aunque matiza que las ocupaciones fueron buenas. «La Semana Santa fue un tanto extraña, aunque con buenas ocupaciones. Nosotros somos especialmente sensibles al tiempo y a finales de mayo y principios de junio las ocupaciones cayeron hasta poco más del 60%», indica. Bonet, en todo caso, indica que la euforia de años anteriores ha desaparecido. «Falta la alegría que había tras la pandemia. Las contrataciones de último minuto no son tan efusivas. Además, estamos notando que falta alegría en el gasto, especialmente entre los alemanes», señala.

El presidente de la Asociación Hotelera de la Colònia de Sant Jordi confía en que septiembre y octubre sean buenos, aunque considera que aún es pronto. «Históricamente, septiembre siempre ha sido un buen mes en la Colònia de Sant Jordi. Este año, tenemos buenas perspectivas, aunque aún es un poco pronto, especialmente para calibrar qué puede suceder en octubre», indica. Bonet asegura que han subido precios, aunque reconoce que algunos establecimientos han tenido que reajustas sus precios. «Los precios han experimentado un lógico crecimiento, aunque en algunos hoteles se han realizado reajustes a la baja para acabar de llenar, aunque siempre por encima de temporadas anteriores», manifiesta. Finalmente, Bonet reclama diálogo con el nuevo Govern. «Hemos de sentarnos a hablar. Se ha de recuperar la bolsa de plazas, pero desde el consenso», señala.

Lluís Rullan, presidente de la Asociación Hotelera de Sóller, indica que este 2023 es como un año normal. «Este año, la actividad es la de un año normal. La ocupación en febrero fue del 70%, seis puntos más que el año pasado; en marzo, del 67%, doce puntos más; en abril fue del 83%, siete puntos menos. En junio fue un punto porcentual menos que en 2022. Comparado con 2019 es un año similar, pero sí que notamos una ralentización de las nuevas reservas. En agosto de 2022 tuvimos una ocupación del 92%, cuando la previsión a finales de junio era del 81%. Para julio, el año pasado llegamos al 92%, y la previsión para este es del 78%. Entran algunas reservas de última hora, no muchas», indica.

El presidente de los hoteleros de Sóller señala que las tarifas se han incrementado. «En 2021 tuvimos los mismos precios y en 2022 subieron, pero poco. Este año sí que ha habido una subida por la inflación», indica. Rullan explica que la movilidad ha mejorado en Sóller, ya que hay seis nuevos taxis de temporada y ocho licencias VTC que se unen a los doce taxis que había hasta ahora. «En cuanto a las normativas autonómicas, deberemos esperar a reunirnos con el Govern. La normativa de camas está en vigor, y la cuestión de la renovación de calderas veremos si continúa o no. Esperamos poder colaborar», señala.

La presidenta de la Asociación Hotelera de Cala Millor Inès Batle explica que la temporada, tras un buen inicio, no ha sido fácil. «La East Mallorca Cup de fútbol provocó que tuviéramos un gran inicio de temporada. Numerosos hoteles, incluso, abrieron, antes de lo habitual. Después, ha sido complicado y no fue hasta finales de mayo cuando la situación ha mejorado. En todo caso, es una temporada irregular, puesto que en junio es habitual que las ocupaciones estén entre el 80% y el 90%, pero este año algunos establecimientos han superado ligeramente el 60%», indica.

Batle asegura que las reservas de última hora han fallado en esta oportunidad. «Es habitual que las reservas de último minuto acaben de redondear la ocupación. En esta ocasión no han entrado como antes. La recesión de Alemania y la peculiar situación del Reino Unido se están notando. Hay hoteleros nerviosos. Además, hay que tener en cuenta que las aerolíneas que operan en Alemania están realizando grandes ofertas para volar hacia Turquía, que también nos puede perjudicar», manifiesta.
Respecto a los precios, Batle asegura que se han subido, aunque reconoce que ahora hay ofertas para conseguir mejorar la ocupación. La presidenta de la Asociación Hotelera de Cala Millor considera que debe levantarse la moratoria y recuperar la bolsa de plazas. En todo caso, matiza que deberían vincularse las nuevas plazas con las sostenibilidad. «Debería levantarse la moratoria, pero con condiciones. Deberían vincularse las nuevas plazas con criterios de circularidad y sostenibilidad, también las de alquiler vacacional», señala.

Jaume Salas, presidente de la Associació Hotelera de Pollença, considera que será una buena, pero no espléndida ni de acuerdo con las expectativas que se manejaban meses atrás. «La temporada no va de acuerdo con las expectativas que se habían generado de forma generalizada en los medios. Yo ya lo advertí en marzo. La subida de los tipos de interés, la recesión en Alemania, la subida de los precios de los vuelos chárter un 30-35% y más los vuelos regulares... han hecho que los turistas vengan en temporada baja, cuando todavía no habían subido tanto los precios. Estamos teniendo ocupaciones del 70-75% cuando el año pasado eran del 90-95%. Esta temporada no será mala, pero no será espléndida como la del año pasado. Será buena, pero muy inferior a la del año pasado y a las expectativas que se habían generado», puntualiza, y señala que a partir de finales de julio y durante agosto confían en igualar las cifras del año pasado o acercarse.

En cuanto a los precios, indica que no se hacen ofertas generalizadas. «La subida anunciada a los turoperadores es de entre un 6% y un 10%, pero sobre estos precios ya en tarifa para este año no se hacen ofertas generalizadas. En todo caso se da alguna cesión en servicio, no en precio», valora. Jaume Salas espera del Govern una apuesta amplia y clara por el sector turístico y por la formación cualificada. «Necesitamos más formación del personal. No por tener dos manos ya se puede ser camarero. Debemos apostar por la formación y cambiar políticas para tener personal cualificado. En nuestra zona, el hotel Formentor nos abrirá las puertas al mercado americano y debemos tener un servicio correcto y de acuerdo con lo que se ofrece al cliente», expone.

Respecto a la bolsa de plazas, Salas indica que antes de abrir el debate se debe regularizar o atajar la oferta ilegal. «Esta es una pregunta que debemos hacernos como sociedad. Somos una área turística importante en el mundo con una oferta de villas, apartamentos y hoteles. Pero no tiene demasiado sentido crecer en plazas si las que hay no están regularizadas. En la actualidad hay muchas villas pirata. Lo que se pueda regularizar se debe regularizar y lo que no, acotar. Después podremos hablar», concluye.

Javier Vich, presidente de la Asociación Hotelera de Palma y Cala Major, asegura que 2023 es un año excelente desde sus inicios. «La temporada está siendo excelente. La realidad es que 2023 está siendo un gran año desde sus inicios. El año comenzó mucho mejor de lo habitual, puesto que el Palau de Congressos de Palma registró gran actividad. Además, a partir de Semana Santa, que arrancó la temporada propiamente dicha, las ocupaciones han sido muy buenas. Y con precios elevados. Los vuelos directos de Estados Unidos o los cruceros que tienen su base en Palma han incrementado las pernoctaciones», explica.

Pero si hasta mediados de julio, la temporada ha sido excelente, Vich considera que aún es pronto para valorar el futuro más inmediato. «Hay una ralentización en las reservas en los últimos quince días de julio, que se prolonga hasta agosto. El ritmo de reservas se ha paralizado un poco. En Palma no hacemos ofertas. Es muy pronto para saber cómo irá en septiembre y en octubre, pero el año pasado fueron muy buenos. Esperamos que sean excelentes», señala. Respecto al nou Govern, Vich reclama que pongan en valor el turismo. «Espero que el Govern y los hoteleros podamos trabajar conjuntamente. El diálogo y el consenso son imprescidibles. Espero que el Govern ponga al turismo como eje esratégico de la Comunitat», manifiesta.

La presidenta de la Asociación Hotelera de Capdepera, Maria Antònia Moll, no está especialmente satisfecha con el desarrollo de la temporada. Reconoce que la ocupación es buena, pero descarta catalogarla de excelente. «Podríamos decir que la mitad de los establecimientos de Capdepera tienen una buena ocupación, mientras que es regular para la otra mitad. No llegamos al 90% o al 95% en prácticamente ningún caso», señala. Moll señala que las reservas de última hora llegan con cuentagotas y no han sido suficientes para mejorar ostensiblemente la ocupación. «Confiábamos en las reservas last minute para conseguir una ocupación excelente, pero llegan de forma limitada y como en todo caso hay muchas plazas libres, las reservas de último minuto no sirven para llenar los establecimientos», indica.

La presidenta de la Asociación Hotelera de Capdepera reconoce que queda mucho trabajo por hacer para mejorar la estacionalidad. «Es difícil romper la estacionalidad. Alrededor del 10% de los establecimientos de la zona pueden abrir en febrero para acoger a senderistas, mientras que entre el 50% y el 60% abren coincidiendo con la Semana Santa. El resto, en mayo. Intentamos que la temporada sea lo más larga posible, pero es muy complicado», manifiesta. Moll asegura que las características de la zona turística de Capdepera provocan que los precios sean muy diferentes en función del establecimiento. «Las plazas están muy atomizadas en nuestra zona y los precios son muy diferentes», explica.

Finalmente, Moll reclama al nuevo Govern inversiones en la zona, al tiempo que considera que no es necesario que haya nuevas plazas. «Hemos de mantener en las mejores condiciones las infraestructuras que tenemos. Debemos mejorar la seguridad, la limpieza y contar con un plan de embellecimiento. Entiendo que el Govern debe afrontar también la moratoria. Facilitar un cambio de uso en los hoteles más obsoletos y poco competitivos es importante. Personalmente, creo que Capdepera no necesita nuevas plazas», sentencia.

El presidente de la Asociación Hotelera de Palmanova-Magaluf, Mauricio Carballeda, explica que la temporada comenzó en mayo, pero es muy buena. «Estamos satisfechos. La gran mayoría de los hoteles abrieron en mayo, pero la temporada es buena. Agosto será excelente, pero es pronto para saber qué pasará en septiembre y octubre. Esperamos que sean buenos meses, pero es pronto para saberlo con exactitud», explica. Carballeda asegura que los precios, en general, se han incrementado y reitera la apuesta inequívoca por la calidad. «Los establecimientos, en general, han incrementado precios, pero de forma desigual. La inflación ha provocado un fuerte aumento de los costes que la subida de precios no ha conseguido compensar. La apuesta por la calidad es generalizada, unánime. Hoy, estamos todos de acuerdo, también la restauración y el ocio. Los establecimientos se han dado cuenta de que la calidad es imprescindible para dar valor a sus establecimientos. En Palmanova, la apertura del Hotel Zel y el beach club El Beso darán un nuevo impulso a la zona. Esperamos también que el paseo marítimo de Magaluf contribuya a mejorar la zona», indica. Refiriéndose al nuevo Govern, el presidente de la Asociación Hotelera de Palmanova-Magaluf apunta a que confíen en la colaboración público-privada. «Que mantengan lo que funciona y apuesten por la calidad. La colaboración público-privada es fundamental para mejorar», señala.

Mientras que en la zona de Portocolom, el inicio de la temporada no ha ido bien. Así lo indica Joan Esteva, presidente de la Associació Hotelera de la zona. «La ocupación en abril y hasta mediados de mayo fue regular. No fue buena. Entre mediados de mayo y hasta el 15 de junio, fue muy mala. Ahora en julio y agosto consideramos que va bien, es la de una temporada normal. Pensamos que el mal tiempo hizo que no entraran reservas de última hora», indica. En cuanto a los precios, se mueven dentro de la normalidad. «Los precios son un poco más altos que el año pasado, pero no mucho. No hemos tenido que hacer ofertas», señala. Asimismo, Joan Esteva explica que la principal dificultad que tienen en estos momentos es la falta de personal. «No hemos tenido todavía ninguna reunión con los nuevos gobernantes. El problema mayoritario que tenemos son los problemas para encontrar personal», concluye.

Christian Roses, presidente de la Asociación Hotelera de Santa Ponça, cataloga la temporada de muy buena y explica que se inició a principios de abril. «La temporada va muy bien, es muy buena. La ocupación media desde primeros de abril ronda el 80%. En agosto, la ocupación será excelente. El lleno está prácticamente asegurado en todos los establecimientos. En septiembre y octubre esperamos también ocupaciones muy buenas. De hecho, septiembre cada año es mejor. Octubre es aún una incógnita, pero confiamos que sea bueno», indica.

En este sentido, Roses apunta a la inflación y la falta de personal como los principales problemas. «De momento, no tenemos problemas de ocupación. Las grandes dificultades de esta temporada son la falta de personal y la inflación. Hemos conseguido incrementar los precios un 10% de media, aunque la subida va en función del establecimiento. Los precios, hoy en día, son muy dinámicos y varían en función de la demanda», significa. Finalmente, respecto al nuevo Govern, Roses reclama menos burocracia y agilidad en las tramitaciones. «Sería importante que la burocracia se redujera y que las tramitaciones fueran más rápidas. Bajar los impuestos a trabajadores y empresas sería también muy positivo», indica.

Susana de Juan, presidenta de la Asociación Hotelera de s’Illot-Cala Moreia, reconoce que la temporada es muy buena desde mediados de junio. «En nuestra zona, la temporada comienza mayoritariamente a finales de abril y principios de mayo. Desde mediados de junio va muy bien, con excelentes ocupaciones a buenos precios. Las perspectivas para agosto son buenísimas, pero falta saber cómo irá en septiembre y octubre. Es muy pronto aún. Septiembre ha ido mejorando en los últimos años, aunque estamos a la expectativa», indica. Refiriéndose a los precios, De Juan asegura que han podido subirlos de forma importante en los meses centrales de la temporada alta. «En mayo tuvimos que hacer ofertas, pero en los meses centrales de la temporada sí que hemos podido subir los precios», señala.

La presidenta de la Asociación Hotelera de Cala Moreia reclamaría al nuevo Govern que pongan al turismo en su justo lugar. «El turismo debe estar en su sitio. Es la principal fuente de ingresos de las Islas. Tenemos la suerte de estar a dos horas de avión de los principales mercados emisores, pero es muy necesaria la promoción. Entre otras cuestiones, hay que insistir en la apuesta por la calidad», apunta.

Martí Xamena, presidente de la Associació Hotelera d’Illetes, explica que hasta el momento han tenido ocupaciones de entre el 70% y el 90%, con reservas de última hora. «De momento, bien. Cuesta, pero van entrando reservas», indica. Eso sí, no tiene ninguna certeza sobre el verano. «Es muy mal de prever», señala. Respecto a los precios, Martí Xamena indica que han subido entre un 5% y un 8%, la mitad que la inflación. «Espero que el nuevo Govern haga lo contrario de lo que han hecho los anteriores. Nos han asfixiado. No quieren turistas. No han hecho promoción. Los cruceristas hacen mucho bulto, pero tampoco hay tanta gente», señala.

El presidente de la Asociación Hotelera de Cales de Mallorca, Joan Pol, se muestra muy satisfecho de como se está desarrollando la temporada. «La inmensa mayoría de los hoteles abrimos en mayo. La temporada está siendo buena hasta ahora y agosto también irá bien», asegura. Respecto a septiembre y octubre, Pol confía en que vayan bien. «Es pronto para saber con seguridad la ocupación que podemos tener, pero creemos que va a ir bien. De hecho, en Cales de Mallorca, tradicionalmente septiembre y octubre han sido buenos», indica.

El presidente de la Asociación Hotelera de Cales de Mallorca asegura también que han podido subir precios. «Hemos subido precios, aunque tampoco no ha sido para tirar cohetes. Es importante destacar, en todo caso, que no hemos tenido que hacer tantas ofertas como en años anteriores», manifiesta. Finalmente, y respecto a los nuevos responsables políticos, Pol alaba el nombramiento de Marcial Rodríguez como conseller insular de Turisme. «Las competencias de turismo están transferidas al Consell de Mallorca. Conozco a Marcial Rodríguez y creo que es un gran acierto su nombramiento. Es honrado y tiene conocimientos de turismo», apunta.

Pedro Marín, recientemente elegido nuevo presidente de la Associació d’Hotelers de la Platja de Palma, se muestra satisfecho con el inicio de campaña, similar a la de 2019. «La temporada empezó con datos similares a las del año pasado, que ya se equipararon a 2019. Mes a mes hemos visto que se mantenía esta tónica y parece que continuaremos con estos datos, que ya se mueven entre el 75% y el 85% de ocupación media durante todo el verano. Aun así, continúa la tendencia de reservas de última hora, lo que complica hablar de previsiones a largo plazo», señala. De cara al nuevo Govern, espera que den a la Platja de Palma «las oportunidades que se merece como zona madura y destino turístico de reconocimiento mundial», y que hagan un «esfuerzo por equipar las inversiones públicas con las realizadas en el sector».

El presidente de la Asociación Hotelera de Cala d’Or, Joan Francesc Rigo, apunta a que la temporada es buena, pero no tanto como el año anterior. «Las previsiones iniciales eran mejores, pero es una buena temporada, aunque no tanto como el año pasado. La ocupación ha descendido un poco, hemos conseguido aumentar los precios, pero la rentabilidad será menor», explica, al tiempo que septiembre y octubre serán buenos meses aunque también peores que los del año anterior. Rigo, refiriéndose a los nuevos responsables políticos de turismo en las diferentes instituciones, reclama que crean en la colaboración público-privada. «Solicitaría a los nuevos responsables de Turisme que opten por la colaboración público-privada», indica.

Antoni Mayol, presidente de la Asociación Hotelera de Peguera y Cala Fornells, señala que la temporada es mucho mejor que la anterior. «Comenzamos a trabajar en febrero y el inicio ya fue mucho mejor que el año pasado. En febrero y marzo conseguimos ocupaciones por encima del 60%. Y desde mayo estamos en torno al 90% como mínimo. Esperamos acabar julio y agosto con una ocupación media en torno al 95%», afirma. Respecto a septiembre y octubre, Mayol es también optimista. «Históricamente, septiembre es un gran mes en Peguera. Esperamos una ocupación que ronde el 90%. Y octubre es también un buen mes. Se celebra la Challenge de triatlón y habitualmente la ocupación se sitúa en torno al 80%», explica. Mayol asegura que han podido subir los precios, aunque el incremento no compensa la inflación. «Hemos aumentado precios y mitigado así el incremento de gastos que nos ha provocado la inflación», indica.

El presidente de la Asociación Hotelera de Peguera y Cala Fornells reclama al nuevo Govern que ponga en valor el turismo y se muestra partidario de que se mantenga la moratoria. «Pediría a los responsables políticos de Turisme que pongan en valor la principal actividad económica de las Islas y que escuchen al sector. Respecto la moratoria, no somos partidarios de crecer más en plazas. En los últimos años han crecido en demasía las plazas de viviendas vacacionales. Si se mantiene la moratoria me parece bien», comenta.

Finalmente, Luis Sancho, presidente de la asociación hotelera Reis de Mallorca, explica que en lo que va de temporada la ocupación de sus establecimientos ha sido del 84%, y que esperan alcanzar el 90% en julio y agosto. «Los precios han subido entre un 5% y un 10%», indica. «Nuestros hoteles asociados son heterogéneos, la mayoría son pequeños, y lo que pedimos es una simplificación de las obligaciones administrativas para facilitar la gestión a las pymes hoteleras», concluye.