Miquel Martorell y Antònia Roca, esta mañana en el Principal de Palma. | Adrián Malagamba

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Miquel Martorell asume la dirección gerente del Teatre Principal de Palma tras la aprobación por junta extraordinaria de su nombramiento llevada a cabo por el Patronato de la Fundació del espacio de Palma presidida por la vicepresidenta del Consell, Antònia Roca, quien presentó a Martorell a la prensa tras el encuentro. Se confirma así lo previsto tras la decisión de la comisión evaluadora por unanimidad que designó a Martorell como el candidato idóneo.

Así pues, la entrada del Principal de Palma ha acogido la primera presentación en sociedad, aunque haya sido en petit comité para prensa, trabajadores y responsables políticos, del nuevo director gerente del Principal que asume el cargo para los próximos 4 años (prorrogable por un máximo de dos años más) y pone fin a una etapa en la que el teatro palmesano ha carecido de dirección tras la renuncia de Josep R. Cerdà el pasado verano.

Roca, que también es consellera de Cultura, destacó de Martorell «su perfil muy técnico, con reconocido prestigio y trayectoria vinculada a la institución y con una red importante de contactos internacionales» además de hacer hincapié en el hecho de que se trata del «trabajador más antiguo del Teatre» y que su nombramiento es el resultado de un «proceso con baremaje y transparente».

Por su parte, Martorell, que se mostró feliz y entusiasmado por su nueva etapa, pide algo de tiempo para presentar en sociedad tranquilamente su plan director, pero sí destapó que la filosofía que regirá su proyecto será la de «continuar» el trabajo bien hecho hasta ahora en los años cercanos con la producción y la coproducción como ejes principales, además del intento de lograr exportar el talento local más si cabe y generar redes con centros similares como el Dramático Nacional de Madrid y el Teatre Nacional de Catalunya.

Finalmente, destacó Martorell que una de las ideas que más ha repetido en su proyecto presentado es el de que tanto artistas como público tengan una «experiencia impecable» desde el momento en el que entran por la puerta del Principal y durante toda su estancia en el mismo.