De los olivos antiguos mallorquines han escrito todos los grandes literatos que han pasado por Mallorca: Rubén Darío, Unamuno, Azorín, Gabriela Mistral o Gaston Vuillier (1903), que se refirió a los olivos serranos «con sus troncos bizarramente agujereados, retorcidos, aferrados al suelo. A nadie que pasa por Mallorca se le escapa la belleza de sus olivos viejo». Es verdad que Costa i Llobera se decidió por el pino de Formentor pero solo se refería a un pino de su predio, solo a uno, y para ensalzarlo poéticamente lo destaca sobre las oliveras ancestrales. Y hete aquí que uno de los dibujantes y pintores más minuciosos e hiperrealistas que tenemos en Mallorca es Miguel Trías Horrach (Palma, 1942). Ahora expone en la Fundació Coll Bardolet una colección de 42 dibujos de este árbol.
ENTREVISTA
Miguel Trías Horrach: «Creo que hay una conexión directa entre los olivos y la luz mediterránea»
El artista expone una colección de dibujos de 42 olivos en la Fundación Coll Bardolet de Valldemossa
También en Noticias
- Una anciana sufre un ictus tras ser agredida por una joven en Son Cladera
- El drama de la vivienda en la Isla, a un paso del estallido social por su precio
- Un fallo en el sistema de seguridad deja encerrados a media docena de presos en un furgón de la Policía Nacional
- «Era inocente, pero tuve que dimitir de jefe de Policía para proteger a mi familia»
- «Nadie quiere venir a trabajar a Baleares por el alto nivel de vida»
1 comentario
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
Resulta difícil no quedarse rezagado ante los viejos olivos de esta tierra mientras uno intenta leer su historia en sus formas. En su día le dediqué unos versos a un olivo de Coanegra; no recuerdo si lo conservo en alguna libreta o si se perdió. También se perderán algún día, lejano, todas las obras y todos los dibujos; pero los olivos seguirán ahí, y quienes caigan en su hechizo seguirán sin saber si son madera o si son piedra. De momento habrá que visitar la exposición del señor Trías, un hombre sabio y con buena mano.