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Cuando se pasea por la calle se suele sentir la curiosidad y a la vez la necesidad de asomarse a ese escaparate o aquellos ventanales que más llaman la atención para saber qué esconden. A veces son tiendas con una decoración muy cuidada, otras patios y galerías de arte. Este último sector está en plena ebullición con la apertura, en menos de un año, de nuevos espacios en Palma. Quieren mostrar otra visión del arte y son las galerías Fermay, 2B, Marimón y La Bibi.

Empezar nuevos proyectos es lo que les ha dado el empujón a estas personas para dar el primer paso y abrir estas nueva galerías que se encuentran en diferentes puntos de la ciudad, algunas en sus alrededores, y que pretenden aportar su grano de arena en el mundo artístico dando a conocer a artistas emergentes o marcar otro paso a aquellos que ya tienen su recorrido hecho.

Cada uno de estos espacios muestran sus propias inquietudes que las hacen únicas, aunque todas tienen ese nexo de unión y en algunos aspectos tienen el mismo objetivo. Uno de estos puntos es la localización, algunas siguen apostando por establecerse en el núcleo del resto de galerías, otras apuestan por llevar el arte a otros extremos de la ciudad. El lugar que han escogido ha sido con la idea de poder aportar riqueza a la zona, así lo hizo la 2B Art Gallery con el propósito de «contribuir al nuevo aspecto del barrio de Nou Llevant» según explica su directora Montse Torras.

Siguiendo en la misma línea está la Galería Fermay que se encuentra cerca de Blanquerna en un espacio que al dueño le cautivó desde el primer instante por su gran luz natural, también para poder «traer un poco de arte a una zona residencial y así, a la vez, alejarlo del centro y mostrar que no es necesario estar ahí», cuenta Antoni Ferrer.

Ya un poco más lejos de la capital, en Establiments, se sitúa la sede de La Bibi, una galería innovadora que apuesta por las exposiciones efímeras. Su director, Marc Bibiloni narra que «elegimos esta zona porque queríamos estar rodeados de naturaleza y esto fue lo que nos encontramos, tampoco me interesaba estar en el centro de Palma para poder trasmitir lo que queremos».

En la parte opuesta, se encuentra la nueva galería Marimón que ha apostado por abrir en el núcleo de las galerías: «Quería estar entre las que tienen más recorrido y que es un sitio de referencia porque todo el mundo las conoce», sentencia su dueño, Biel Perelló.

Otro de los aspectos que une a estas cuatro galerías es que en todos los espacios en los que se encuentran tienen un trasfondo y ya por sí solos cuentan una historia, por ello han tenido que ser reformados para poder dar inicio a una nueva. La Galería Fermay anteriormente era una yesería donde se hacían molduras de yeso, en el caso de la galería Marimón era un garaje, en la 2B Art Gallery era un gimnasio de artes marciales, por último La Bibi Gallery era una fábrica de tela de llengües. Espacios que por una cosa u otra llamaron la atención de sus propietarios y decidieron darle esta segunda vida.

Por otro lado, todas ellas tienen su propio estilo en cuanto al tipo de arte que muestran en sus paredes. El contemporáneo es el que invade las galerías Fermay y Marimón, aunque esta última compagina la figuración con el abstracto, desde el clasicismo más actual hasta las más avanzadas vanguardias. La 2B Art Gallery apuesta por «dar más visibilidad y mostrar esa otra parte del arte urbano que no solo se encuentra en las calles». Finalmente La Bibi va un paso más allá en el que apuesta por lo efímero y lleva más allá el concepto del arte donde las propias obras de los artistas forman parte del propio espacio, por lo que el conjunto es la obra en sí, además que la hace única, ya que solo se puede visitar durante un tiempo muy limitado.

Recibimiento

El arte siempre tiene buen recibimiento y todo el mundo lo acoge con los brazos abiertos. Lo mismo les ha sucedido a ellos, tanto por parte de los vecinos de la zona como de otros artistas. El director de la galería Fermay cuenta que «desde que inauguramos muchos residentes se han acercado para curiosear y nos han preguntado qué éramos, al responderles nos han dicho que estaban muy contentos de poder contar con un sitio así en el barrio. Todo han sido, por el momento, críticas positivas».

También muchos artistas se han postulado para poder llenar las paredes de estas nuevas galerías con sus obras. Torras afirma que «recibimos muchos mensajes de varios artistas que están interesados en traer su trabajo a la galería, a muchos de ellos les tenemos que rechazar, aunque es verdad que hay otros muy llamativos». Por otro lado, la mayoría o la gran parte de las obras que se encuentran están vendidas, como es el caso del 95% de las «tenemos actualmente», detalla Perelló mientras que Ferrer sentencia que «las galerías están para eso: para mostrar y vender». En La Bibi todas las obras que exponen «ya están vendidas justo antes de exponer o el mismo día de la inauguración hacen sold out».

Asimismo, todas participarán en La Nit de l’Art que se celebrará entre el 15 y 17 de septiembre. Aunque hayan abierto recientemente no será un inconveniente, ya que tienen varias exposiciones especiales organizadas. También, algunos que otros actos complementarios a este evento para terminar este circulo artístico. Una celebración que esperan con muchas ganas e ilusión.

Nuevos rincones que hacen que la ciudad se llene de arte y que llame la atención a todas aquellas personas que pasen por delante de sus espacios. Nuevas galerías para seguir creando curiosidad, pero, sobre todo, para poder mostrar a todo tipo de arte y artistas, que se den a conocer y que la gente se sienta atraída.