Creación. A la derecha, José Juan Umbert, Paco González y Pep Álvarez, posando en Palma para esta entrevista. Arriba, la portada de la primera parte de ‘Retorn’, diseñada por la artista Natalia Farinyas. | Teresa Ayuga

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En los albores de este otoño recién estrenado y con la resaca de verano superada, el nuevo disco de Anegats, Retorn. Vol. 1 (Blau) bien podría evocar septiembre; un mes donde el frío se asoma, caen algunos chaparrones pero también brilla el sol. Y es que en esta primera entrega de Retorn –que lanzaron el pasado 30 de abril–, la banda de Son Servera liderada por Pep Álvarez, José Juan Umbert y Paco González, toma asiento –literalmente– y ofrece unas canciones más «introspectivas», «pausadas» y «reflexivas» en un formato acústico con el que se quieren «solidarizar» con sus seguidores debido a la pandemia.

Además, para este nuevo trabajo, que consta de un total de 14 temas, la banda decidió lanzarlos en dos entregas diferentes, en formato de EP’s. La primera parte la conforman seis canciones –Aprenent, Somia gran, Eima i coratge, Animals, Un cel y Calma–, que presentaron con tres conciertos en Lloseta a finales de abril y principios de mayo.

Gira

Lo que tenía que ser una pequeña gira por la Isla se convirtió en un gran recorrido de 30 conciertos en 26 municipios diferentes y que les ha llevado a actuar ante más de 20.000 personas, todo un éxito teniendo en cuenta la situación de incertidumbre y cambios constantes por culpa de la pandemia. Este sábado continuarán su ruta en el Centre Cap Vermell de Cala Rajada y después, el 16 de octubre, en el parque de Sa Riera (dentro del Gira-Illa Fest). Antes de terminar el año también recalarán en Inca y en Petra.

Si bien Anegats se caracterizaba sobre todo por su «contundente rock», como ellos mismos apuntan, con la pandemia y los espectadores sentados en sus butacas, encajaba mejor un ritmo más tranquilo y pausado. «No concebíamos temas como Paraula de senyor o Tramuntana con la gente sentada y pasándolo mal por no poder estar de pie bailando», afirma Umbert, que en este proyecto vuelve a estar a la guitarra pero también canta en Animals.

Así las cosas, las circunstancias propiciaron un pequeño cambio en la puesta en escena de Anegats. «Cambiamos los instrumentos para el formato acústico y también hemos podido cuidar más los detalles, los matices. En los conciertos, que ahora son más íntimos, explicamos también la historia que hay detrás de cada canción. Muchos temas están compuestos precisamente durante el confinamiento. Es como una nueva dimensión en la que podemos reflexionar en voz alta», apunta Álvarez, voz, guitarra acústica y letrista del grupo. Por su parte, González –bajo, contrabajo, guiarra y voz– advierte que «la evolución de Anegats ha sido muy natural. Nunca hemos tenido muchas pretensiones ni hemos buscado nada en ningún momento, sino que siempre ha estado relacionado con las vivencias de cada uno». De hecho, por motivos familiares, en 2014 el conjunto se tomó un respiro que culminó con el álbum Ànima niu (Blau, 2019).

Homenaje

De esta manera, Retorn quiere ser también un «homenaje» al cariño de todos los fieles seguidores de la banda, que se formó a principios de los 2000 en un garaje de Son Servera.

El año que viene se cumplirán 18 años desde que lanzaron su primer trabajo discográfico y, precisamente, en el primer trimestre de 2022, está previsto que vea la luz la segunda parte de Retorn con ocho canciones nuevas. Ahora sí, Álvarez, Umbert y González avanzan que serán más «eléctricas». En ese sentido, será un «retorno a nuestra parte más primigenia».