Manel Ismael Serrano posó en Palma para esta entrevista. | Clara Ferrer

TW
1

El dramaturgo Manel Ismael Serrano (Son Servera, 1977), que acaba de ser seleccionado como primer autor residente del Centre de Creació de Dramatúrgia Espai el Tub –gestionado por Produccions de Ferro–, está preparando lo que sería su primera serie.

Se trata de una serie antológica, es decir, con una historia y personajes diferentes e independientes en cada capítulo, que de momento cuenta con seis episodios de aproximadamente una hora de duración cada uno. «Son historias de miedo y misterio, podría decirse que inspiradas en Historias para no dormir, además de Inside Nº 9 y Black Mirror, también con un toque de humor y comedia negra», señala Serrano.

Inmersión

El origen de esta inmersión y nueva aventura de Serrano se remonta a 2011, cuando Serrano se convirtió en el primer mallorquín en ganar el premio Margarita Xirgu de teatro radiofónico, que organiza Radio Nacional de España, con la pieza El oscuro túnel de la mirilla.

A partir de esta importante distinción conoció a una serie de personas que «compartían mi interés por este tipo de relatos surrealistas y negros», como los guionistas Sergio y Pablo Aguinaga y Javier Lorenzo, quienes estrenaron en 2018 La vida no es un lugar seguro en el Teatro Lara de Madrid.

«Es una obra que reflexiona sobre cómo el destino puede cambiar la vida de una persona, siendo el destino un personaje más», apunta. «Seguí de cerca esta obra de teatro y fui a verla a la capital. Nos encontramos varias veces y decidimos adaptar la idea central de la obra de teatro a una serie, a la que también se añadió el montador Chuchi Espinosa, que ha trabajado en series documentales de Amazon y Movistar», añade.

«Llevamos más de un año trabajando con este proyecto y he viajado varias veces a Madrid, donde escribimos el episodio piloto. Hemos escrito ya seis capítulos y uno de ellos, Club Milagros, es una idea original mía. En él, una mujer desesperada entra en un prostíbulo en mitad de la noche buscando a su marido. Sin embargo, allí una prostituta en silla de ruedas le asegura que allí no le encontrará y que en ese local existe una clientela muy diferente», detalla.

Plataformas

Ahora, con la serie ya escrita, el equipo está tratando con plataformas y productoras para poder llevar a cabo esta ficción. Manel avanza que «ya existen conversaciones», así como con un equipo artístico que podría llevar la serie a otro nivel. «Hay algunos directores, actores y actrices importantes que ya nos han trasladado su interés por la originalidad del proyecto», adelanta ilusionado Manel.