Tito López, Javier Rey, Pedro Barbadillo, Catalina Solivellas, Andreu Serra, Sonia Martínez, Ángela Cremonte y Curro Novallas, este viernes. | Pere Bota

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Casi una semana lleva rodando el equipo de Atresmedia Televisión en Mallorca su nueva serie, Mentiras, protagonizada por Javier Rey y Ángela Cremonte. Sin duda, es la ficción más mallorquina de esta productora, pues prácticamente en su totalidad está ambientada en la Isla, donde el rodaje se prolongará hasta el próximo 20 de diciembre. Así lo anunciaron ayer en una rueda de prensa celebrada en Es Baluard de Palma los directores, productores y protagonistas de la serie.

Precisamente pocos días atrás, a escasos metros, Es Baluard y Sa Feixina se convertían en escenario de Mentiras. El equipo también ha rodado en Es Trenc, y Cala Deià, contando con el apoyo del Govern balear, el Consell insular y la Mallorca Film Commission. «Mentiras es una adaptación de la británica Liar, aunque hemos intentado llevarla a nuestro terreno, más cercana a la audiencia de nuestro país. La acción es muy dramática y hay mucho dolor, lo que contrasta con el paisaje idílico de la Isla, lo que todavía hace que tenga más fuerza narrativa», señaló el director Curro Novallas, quien reconoció que «la filmación, sobre todo en Deià, fue nocturna y requirió mucho esfuerzo físico». Sin embargo, el director aseguró que «después de ver el material que hemos ido consiguiendo se confirma que ha sido un acierto total venir a Mallorca».

El rodaje empezó en Madrid, donde se prolongó hasta siete semanas, donde «aprovechamos para grabar comisarías, institutos u hospitales», agregó Novallas. Sin embargo, de los seis capítulos –de 50 minutos de duración cada uno–, «solamente en uno aparece un viaje a la capital». «Es una serie ambientada en Mallorca y, de hecho, la Isla se convierte en un personaje más de la historia», detalla. «Mostramos la Isla desde un punto de vista no tan habitual a lo que estamos acostumbrados a ver en publireportajes, intentamos fotografiarla con nuestra mirada», añade. Novallas insistió también en que «lo más importante es que la historia sea creíble, con grandes dosis de verdad» porque «aunque ocurran cosas horribles no quiere decir que no exista belleza».

Por su parte, Ángela Cremonte, que recordó que sí estuvo trabajando en la Isla para una obra del Teatre Principal [Hamlet, 2016], reconoció que «es una serie muy diferente, el espectador se olvidará de que está en Mallorca porque hay un gran viaje interior a través de los personajes».

El otro director, Tito López, coincidió con Cremonte y Novallas y señaló que «es una serie especial por cómo la estamos planteando, hablamos mucho de la verdad y dirigimos las escenas con bastante libertad, el guion aquí es solamente una guía, por lo que hace que cada escena crezca».

«No estamos teniendo miedo. A veces parece que acabas leyendo un texto escrito, pero aquí cambiamos y digo cosas que, como Ángela, tendría miedo de decir. Es como si me estuviera lanzando en pelotas en una red, que hemos ido tejiendo nosotros mismos. Es un salto de fe», confesó. Javier Rey, que es la primera vez que aterriza en la Isla por trabajo, corroboró lo dicho por el equipo sobre la verdad de la historia y ensalzó el reparto y la serie, que calificó de «altísimo nivel».

Sonia Martínez, directora de Ficción de Atresmedia y directora de Atresmedia Studios, explicó que «cuando nos ofrecieron hacer la adaptación española no lo dudamos ni un momento, era un caramelo, una gozada». Respecto al cásting, Martínez aseguró que «era muy fácil, teníamos casi en la cabeza desde el principio a los actores y actrices que queríamos». Paco Tous, Manuela Velasco y Agnès Llobet, entre otros, completan el elenco.