Instantánea del Dia de Sant Jordi en su celebración del año 2012, una jornada exitosa que los libreros esperan repetir en unas semanas. | Pere Bota

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Es primavera. Regresa el sol, el buen tiempo, los turistas, la playa, el polen... y también el gran día de los libros, Sant Jordi. Será el próximo martes 23 de abril cuando los libros y las rosas invadan el centro de Palma, donde los libreros instalarán su tradicional recorrido, en el que darán a conocer las novedades literarias de este año -muchas de ellas se editan precisamente en estas semanas- y sacarán tesoros y pequeñas joyas que guardan en su 'fondo de armario'. Como novedad, las librerías -más de 30- no regalarán rosas por la compra de un volumen para «no molestar más a los floristas». Así, el sector tiende una mano a las floristerías en un día en el que las rosas también son protagonistas.

El Dia del Llibre es una jornada «muy esperada» por el Gremi de Llibreters de Mallorca, así como por el resto de librerías de Ciutat. «Es una fiesta grande que suele funcionar muy bien. El año pasado tuvimos resultados fantásticos a pesar de la crisis. Se vendieron muchos libros y el ambiente fue muy bueno», apunta Francesc Sanchis, presidente del gremio. A pesar de que la crisis azota con fuerza en este 2013, el librero augura «unos resultados similiares a los de 2012. Este año tenemos buenas expectativas. No las tienen en ningún sitio ni sector, pero es un día en el que la gente participa y no suele fallar. Un libro siempre es un buen regalo».

Si el año pasado, la jornada se animó con pequeñas representaciones de la compañía Circ Bover en un pasacalles, este año «también habrá actividades que acompañen a los libros, pero todavía están por concretar». Mientras, los viandantes y lectores podrán pasear y hojear sus títulos favoritos o los que les llamen la atención por los puestos que se instalarán en la Plaça de Cort, Plaça Major, la calle Sant Miquel, la Plaça d'Espanya y la calle Oms. ¿Qué pasa con el Born? «Ninguna librería lo ha pedido y, además, están instaladas allí las terrazas de los bares, así que si quisieramos alargar el recorrido sería muy difícil», aclara.

Deudas

El Dia del Llibre implica ventas, algo que viene muy bien a los libreros, que están «con la soga al cuello» y a la espera de que las instituciones les abonen las deudas que arrastran desde el año 2011. En el caso del Govern, «están limpios de pagos», excepto por la partida para la Setmana del Llibre en Català de 2011, un total de 28.000 euros. Respecto al Consell, las cifras ascienden «bastante»: 52.000 euros correspondientes a la Fira del Llibre del año 2011, así como por los programas de fomento de la lectura. De 2012, 33.000 euros por las mismas actividades, además de 18.000 de la Setmana del Llibre.