Fachada del Teatre Principal de Palma, tras su rehabilitación. | Jesús Carrillo

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Diez días después de que la dirección de la Fundació Teatre Principal anunciara, a través de los medios de comunicación, un inminente recorte de la plantilla «sobredimensionada» del espacio escénico de Palma, los sindicatos denuncian que, desde entonces, no se ha producido reunión alguna con ningún mandatario de la institución», pese a que éstas están solicitadas desde hace semanas.

Los delegados de personal de la fundación se muestran sorprendidos por las declaraciones que realizó la directora gerente del teatro, Margalida Moner, quien «anunció recortes sin haber negociado con el comité de empresa, ni haberse presentado a la mayoría de los trabajadores».

UGT y CCOO consideran que las palabras de Moner son contradictorias con «el mensaje de tranquilidad que se ha lanzado desde la Vicepresidència del Consell» y aseguran que la «incomunicación» de los nuevos responsables está generando «estrés y angustia» al personal, ya que «la directora sólo mantiene reuniones a puerta cerrada con pocos empleados», dejando a otros «sin tareas».

Despidos

Los sindicatos, y otros trabajadores de Principal con lo que ha podido hablar este periódico, sostienen que en los últimos días la rumorología se ha apoderado del teatro. Según explicaron desde los sindicatos, «hay rumores sobre varios posibles planes: despido masivo de trabajadores, o despido selectivo, y la recontratación de personal de la confianza de la directora». Ante estas opciones, UGT y CCOO se manifiestan en contra «de cualquier despido con dinero público, y también contra la recontratación de personas de confianza». Además, aclaran que «el personal de la fundación no es de confianza política. El único cargo de confianza es el de la directora gerente».

Los delegados de personal rechazan también la actitud de Margalidad Moner, quien dice, según explicaron, que «la situación de los trabajadores está pendiente de un estudio que hace Presidència sobre el personal» y que «cuando se sepa quién se queda y quién se va, ya se presentará la lista y hablará con los trabajadores».

Los sindicatos esperan que haya «un cambio de actitud» y están dispuestos «a abrir un proceso negociador con el máximo respeto a los empleados del Teatre Principal de Palma y sus puestos de trabajo», ya que son ellos «los que cada día hacen que se levante el telón».

En esto momentos, la plantilla de la fundación está integrada por 24 empleados y seis profesores a tiempo parcial. Además, hay ocho empleados a sueldo del Consell de Mallorca, aunque «son plazas que se van extinguiendo». Desde 2009, la plantilla «se consolidó y se recortó», dada la situación económica. «Se bajaron sueldos y eliminaron puestos de trabajo vacantes». «Hay gasto que se podrían replantear», dicen.