«Somos conscientes de las quejas interpuestas, pero siempre hemos trabajado dentro de lo legal, y los conciertos se van a seguir desarrollando con las licencias que tenemos», comentó Elena Sánchez, de la organización del evento.
Desde las siete de la tarde, varios DJ fueron calentando el ambiente de la zona de fiesta del hotel, hasta que poco después de las nueve, el MC Wretch 32 consiguió que los asistentes se terminaran de animar. Durante casi una hora, tocaron temas de cosecha propia, consiguiendo que el público se entregara y vitorease al final de cada canción, tras lo cual, mientras se preparaba todo para la siguiente actuación, DJ Doorly amenizó la fiesta.
Eran las 22.45 cuando, entre el griterío del público, entraba en el escenario el londinense Plan B, que acompañado únicamente con un micro, y gracias a sus efectos vocales, consiguió que todo el público cantara conocidas canciones como I like to move it. Tras esta pequeña introducción, una banda compuesta por dos guitarristas, un bajo, un batería y dos coristas saltó al escenario para interpretar temas del último disco de Plan B, The Defamation of Strickland Banks, que consiguieron enloquecer al público, que se dejaba la voz en canciones como Welcome to the hell, She said o Praying'.
El próximo martes tocarán The Wombats, además de Brothers y los DJ Doorly y Nicola Bear.
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