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Cuatro discos en cinco año no es precisamente un mal balance, y menos si uno ha conseguido, en el camino, hacer de la música su medio de vida, aunque asegure estar más curtido en la derrota que en la victoria, como comenta Pep Toni Ferrer, líder del grupo de avant-folk mallorquín Oliva Trencada, que presenta mañana, a las 20.00, en el ciclo Fascicles Musicals del Museu Es Baluard de Palma, su nuevo trabajo, el esperado Perleta Negra.
Oliva Trencada ha optado de nuevo por el formato libro-disco: «La idea del disco es que Perleta Negra era un pirata mediterráneo que, a lo largo de sus aventuras, fue encontrándose canciones y nos las ofreció para que nosotros las musicáramos», explica Ferrer. «En el libro, se explica el origen de cada una de las once canciones».
«Creo que la gente se llevará una sorpresa con Perleta Negra», comenta. El grupo ha abordado su nuevo álbum con una ambición renovada, que les ha llevado a afianzar ese cruce imposible entre folk mediterráneo y el avant-pop que se intuía en su debut, y añadir algunos arreglos que aportan diversidad al conjunto. «La entrada de Toni Torres -de Fameliars- en el grupo ha sido un factor importante. En ningún momento nos ha preocupado lo que nadie pudiera pensar, hemos hecho lo que nos ha dado la gana».
El grupo actuó recientemente en el Reino Unido, cita que le ha abierto nuevas puertas a un grupo ya acostumbrado a buscarse la vida fuera de la Isla. «Fue una experiencia curiosa. A la gente le gustó y lo más surrealista es que hubo gente que se quedó en la puerta. En cambio, aquí, en Mallorca, a veces tienes la sensación de que el público prefiere ir a conciertos de grupos de fuera antes que apoyar a las bandas locales, y es una lástima». «Oliva Trencada somos el orgullo de Segunda B», comenta Ferrer, debido a que la edición de su disco coincida con la de los nuevos trabajos de Antònia Font y Manel.