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La soledad, el aislamiento o la reflexión son algunas de las temáticas que la artista Jerònima Ramis reúne en una nueva exposición que se inaugura hoy, a partir de las 20.00 horas, en Palma, en la galería Joan Oliver 'Maneu' (calle Montcades, 2).
Después de años sin exponer su trabajo, en esta muestra, que podrá visitarse hasta el próximo 18 de junio, se ha dado «prioridad a lo figurativo y a las piezas más coloristas, a lo más nuevo y a lo que es más atractivo para el público», explicó ayer el galerista Joan Oliver, quien recordó que Jerònima Ramis comenzó a pintar tras el fallecimiento de su padre, Juli Ramis, en el año noventa. Desde entonces, su obra ha ido evolucionando, «cobrando más color y vitalidad».
La exposición, que repasa los veinte años de producción de la artista, reúne óleos, acrílicos y cuadros matéricos en los que se percibe «la influencia de su padre» y, al mismo tiempo, aquélla que otros grandes pintores del siglo XX ejercieron sobre el pintor solleric, como Wilfredo Lam, De Staël, Kandinsky o Picasso. Por otro lado, Oliver 'Maneu' apuntó que en estas piezas también se pueden apreciar «rasgos muy acusados de la personalidad de Jerònima». Un carácter reservado y una personalidad culta que ha mantenido a la artista retirada de los circuitos artísticos, una decisión, sin embargo, que no ha restado valor a su pintura «de gran calidad».