El realizador catalán David Carreras, afincado en Sóller, presentó en Barcelona el estreno oficial de Flores negras, una película basada en la novela homónima de Michael Roddick que cuenta en el reparto con los actores Tobias Moretti, Eduard Fernández, Maximilian Schell, Marta Etura y Maria Grazia Cucinotta.
«En la película todos son malos», explicó Carreras, quien aclaró que «es una historia de desamor de dos personas que han vivido toda su vida en una mentira».
Rodada durante cinco semanas en Viena y dos en Barcelona, Flores negras refleja las dificultades de unos agentes secretos soviéticos después de la caída del muro de Berlín. Un espía al servicio de la República Federal Alemana, consciente de que sus días como agente secreto están contados, abandona el servicio después del fracaso de su última misión, y se lleva consigo a la hija de una espía rusa muerta en extrañas circunstancias.
«Muchas de las armas que desaparecieron durante la caída del muro de Berlín aparecieron después en conflictos de Àfrica», recordó el realizador.
Por su parte, la actriz italiana Cucinotta comentó que «la película refleja la vida de un cierto tipo de gente poderosa», y mantuvo que «siempre al final gana la vida». Cucinotta aseguró que «todo el mundo me trata mal en la película».
El actor Eduard Fernández se interesó por «la capacidad de una persona, en un entorno de máxima frialdad, de ser capaz de dar la vida», y desveló que «para interpretar el papel de espía intenté convertirme en un personaje que pasara un poco desapercibido».
La distribución de Flores negras, que ya puede verse en algunos cines de la Isla, dispondrá de 105 copias y el rodaje ha contado con un presupuesto de 3'6 millones de euros.
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