El presidente de la Fundació Tren de l'Art, Pere A. Serra, guió al Monarca en su recorrido por el nuevo centro de arte.

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El viernes se despedía de las principales autoridades de Balears con la tradicional cena en el Palau de l'Almudaina, pero, antes de abandonar de la Isla, donde ha pasado sus vacaciones estivales, el Rey no quiso desaprovechar la oportunidad de conocer el nuevo Museu Modernista Can Prunera de Sóller, inaugurado por la Fundació Tren de l'Art y el Ferrocarril de Sóller el pasado lunes.

Don Juan Carlos asistió en visita privada al museo, situado en la calle Lluna de la Vall, acompañado por el jefe de la Casa del Rey, Alberto Aza. A las puertas de Can Prunera, fueron recibidos por el presidente de la Fundació Tren de l'Art y presidente editor del Grup Serra, Pere A. Serra; el presidente del Ferrocarril de Sóller, Óscar Mayol; el vicepresidente del Tren de Sóller, Amador Pastor; el consejero del Ferrocarril de Sóller, Vicenç Sastre; la directora del centro, Antònia Maria Miró; la consejera del Grup Serra, Carme Serra, y Rogelio Araújo, gerente de Promomallorca.

Ya dentro de Can Prunera y antes de comenzar la visita, Pere A. Serra presentó a don Juan Carlos a los miembros del comité del museo. Desde el primer instante, el Rey se mostró muy interesado en saber cómo se ha desarrollado el proceso de rehabilitación del edificio y en que le explicaran en qué época se construyó la casa, así como en cuál fue su destino hasta que se iniciara el proceso de recuperación.

Impresionado por la arquitectura del edificio, el Rey también destacó la importante labor que la Fundació Tren de l'Art y el Ferrocarril de Sóller han desarrollado para tratar que espacios como Can Prunera sigan vivos en Mallorca.

La belleza de los suelos, de los motivos modernistas que decoran las ventanas y vidrieras del casal, y de las lámparas fueron muy admirados por don Juan Carlos, quien reconoció que es una maravilla que hoy se pueda conservar una casa tal y como era en 1911, año en que se construyó. Del mismo modo, se sintió también atraído por el mobiliario que viste las diferentes habitaciones.

Por otra parte, el jefe de la Casa del Rey, Alberto Aza, quien estuvo presente el lunes en la inauguración de la casa museo, aprovechó también el encuentro para compartir las impresiones del acto del lunes y para expresar sus opiniones sobre la casa y la colección que acoge.

Antes de iniciar su visita, el Rey descubrió un cuadro en el que aparece retratado por el artista Antonio Calvo Carrión en los años 50, y que ha regalado a Pere A. Serra. Esta obra se encuentra en la entrada de Can Prunera y está acompañada, además, de una placa. Don Juan Carlos también dedicó una litografía de la fachada de Can Prunera, realiza a plumilla, en recuerdo a su primera visita al casal modernista.

La colección de arte
El Rey se mostró en todo momento muy interesado en esta visita. Más de una hora dedicó a recorrer cada una de las diferentes habitaciones de Can Prunera y también salió al jardín, desde donde admiró la fachada interior.

Posteriormente, accedió a las plantas superiores del edificio para conocer las diferente piezas que integran la colección permanente. Así, se sintió especialmente atraído por la obra de diferentes artistas, como Miró, Picasso o Cezanne. El Rey se detuvo también ante otras piezas, como la obra Portrait de femme, de Paul Delvaux. Pere A. Serra, quien atendió al Monarca durante el encuentro, le explicó la vinculación de este artista francés con la Isla y le detalló que la pieza presenta el retrato de una camarera de un bar de Peguera, que el artista frecuentaba por aquella época.

El Rey finalizó su visita fascinado por el valor del conjunto arquitectónico y artístico. Mañana, lunes, pondrá rumbo a Madrid tras dar por concluidas sus vacaciones.