Imagen de archivo de la junta directiva, integrada por Jordi Rumbao, Tomàs Picornell, Amelia Collige y Pep Romero.

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A.LARGO

El anuncio de un cambio de sede para el Conservatori Professional de Música i Dansa de Mallorca, además de generar malestar en el centro, tuvo ayer su primera consecuencia. La junta directiva del centro presentó su dimisión en una carta remitida por la mañana al director general de Formació Professional y Aprenentatge Permanent, Miquel Mestre, quien finalmente a media tarde rechazó esta renuncia.

Los cuatro integrantes de este órgano -Tomàs Picornell, Jordi Rumbao, Amelia Collige y Pep Romero- pusieron su cargo a disposición del director general, a quien le explicaron en dicha misiva los motivos por los que «no nos interesa seguir al frente», comentó el director del Professional, Tomàs Picornell. Al producirse una respuesta institucional rechazando a la vez dicha dimisión, parece que los ánimos se han templado, pero el espacio sigue siendo el origen de una discordia que hoy enfrenta a profesionales, profesores y Administración.

La polémica en cuestión se remonta a hace varias semanas, al 17 de febrero, cuando en el desarrollo de un claustro de profesores se comentó, «casi de imprevisto», la decisión de la Conselleria d'Educació i Cultura de cambiar de ubicación el Conservatori Professional y dirigirlo a un nuevo edificio. Tras conocerse esta noticia, «el ambiente no es bueno y el consejo escolar está bastante preocupado», explicó Picornell, quien apuntó que «no se ha contado con nosotros ni escuchado la opinión de los profesionales». La preocupación es tal que, incluso, se ha pensado en poner en marcha movilizaciones.

El director del Conservatori Professional se reunió el pasado viernes con el director general Miquel Mestre para trasmitirle que «el cambio de espacio no es bueno, lo importante es distribuir bien el que tenemos y mejorar la organización». Tras no llegar a ningún acuerdo, la Junta Directiva tomó ayer esta decisión. «Consideramos que se ha tomado un planteamiento equivocado para resolver la problemática del centro», además «nos piden que mediemos para controlar y calmar el ambiente por una situación que nosotros no hemos generado», explicó.

El director general de Formació Professional y Aprenentatge Permanent, Miquel Mestre, que se encontraba de viaje, comunicó a Tomàs Picornell su deseo de que la junta continué trabajando. Mestre «ha reconocido nuestro buen trabajo y ha asegurado que mantendremos esta misma semana una reunión para llegar a algún acuerdo y aclarar cualquier cuestión», explicó Picornell.