TW
0

JONAS CLIMENT

Sin dar por clausurada una gira (Sa Força des Vent), ya ha empezado otra (Íntim). En la primera, le acompañaron Géminis y la Perico Linale Band, ahora sólo lo hará su guitarra. No es otro que el incombustible Tomeu Penya. En su tierra ya le aguardan tres nuevas fechas en solitario (hoy, en el Auditorium Sa Màniga de Sant Llorenç, a las 21.00; el 27 de febrero en el Teatre de Lloseta y el 27 y 28 de marzo en el Teatre Sa Congregació de Sa Pobla) y una colaboración especial con Al Tall (el 28 de enero, a las 20.30, en el Teatre Principal de Palma). Será con ocasión del concierto de clausura del Any Jaume I, donde el cantautor de Vilafranca y Jan Maria Carlotti se unirán a la banda valenciana en la cantata Vergonya, cavallers, vergonya. La entrada será gratuita, previa recogida en taquilla.

-¿Cúal será su papel en el concierto de homenaje al Rei En Jaume?

-Interpretaré la canción Cançó des de Mallorca, con letra de Vicent Torrent y música compuesta por mí. En ella, hablo del Rei en Jaume, pero desde diferentes puntos de vista: el del rey musulmán Abu Yahia, el de la Mallorca de aquel momento, el de los catalanes llegados del Empordà, y también incluyo diferentes momentos de mi vida artística. La pieza, que dura de doce a quince minutos, acaba a ritmo de country y rock and roll. Además, también cantaré dos canciones mías en solitario y me uniré a todos al final del concierto.

-Esta nueva pieza se sale de su faceta más conocida.

-Me gustaría que la gente comprenda que siempre he sido un cantautor al que le gusta coger caminos diferentes.

-No ha terminado una gira y empieza otra. ¿Se siente en la carretera como pez en el agua?

-La carretera, los aviones y los hoteles me empiezan a cansar. Te despiertas por la mañana y no sabes dónde estás. De lo que no me he cansado es de subirme a un escenario. Soy un privilegiado porque estoy reconocido y puedo vivir de la música y eso es lo máximo que le puede pasar a Tomeu Penya.

-Durante la gira, ¿qué hace en su tiempo libre?

-Normalmente sigo trabajando. Pienso en nuevas melodías porque no hay nada más difícil en el mundo que hacer una canción. Después de 22 discos y cerca de 300 canciones cuesta mucho componer algo que no haya tocado ya. Es algo que siempre está en mi cabeza dando vueltas. Todos los compositores tenemos un esquema para hacer canciones y yo procuro no seguirlo para buscar otros sistemas diferentes.

-Parece que no se separa de su guitarra.

-Puedo componer sin ella. Lo que hago con la guitarra es practicar mucho, más que nunca en estos 25 años. Desde que soy amigo de Paco de Lucía, quien tiene dos casas en la Isla, me enseña a tocar algunas cosas que jamás hubiera soñado antes. Resulta difícil subir este escalón porque nunca había tocado nunca el estilo de Paco de Lucía. Lo suyo es virtuosismo máximo, no se puede explicar.

-¿Por qué le apetece irse de gira en solitario?

-Me apetece volver a tocar la guitarra y estar solo para demostrar al público que sigo siendo el mismo cantautor. Lo que me ha rodeado es por necesidad del mundo en que vivimos. Ahora quiero tocar las canciones tal y como las compuse y no como suenan en el disco, donde hay arreglos de trompetas, violines y otros instrumentos.

-Aparte de estar solo en el escenario, ¿qué otras novedades esconde la gira Íntim?

-Voy a interpretar un repertorio muy diferente al que el público está acostumbrado en las verbenas. Tocaré de 20 a 25 canciones que pasaron desapercebidas para el gran público, el cual se fijó en otras porque fueron más promocionadas o se pusieron de moda, aunque no necesariamente fueran las más buenas. Pero mis seguidores siempre me han dicho cuales eran, para ellos, las mejores y éstas canciones son las que ahora tocaré.

-¿Cuál es su mejor recuerdo de la gira Sa Força des Vent?

-Mi ultimo concierto, en el Mercat de Música Viva de Vic, porque vinieron entre 14.000 y 16.000 personas. Fue impresionante porque la gente cantaba todas las canciones.

-¿Prepara ya nuevo material para después la gira?

-Tengo intención de traducir el disco que tengo en castellano, Fácil, al mallorquín. Me siento en deuda con el publico catalán y de la Isla. Incluiré cuatro o cinco temas traducidos de aquel disco más otras nuevas y en directo.

-Usted se considera un hombre de campo, ¿no le soprende cómo ha cambiado el mundo?

-Yo soy foraviler y pagés de nacimiento, lo que pasa es que no lo ejerzo. Siempre he dicho que nuestra generación, del año 55 al 60, fue muy afortunada porque vivió la mejor época que haya pasado nunca. De estar en pantalones cortos y comer un poco de sobrasada cuando podíamos, a tener de más; de la música folclórica, a los Beatles; y de escribir mal el mallorquín, a hablar inglés y alemán.

-Pero Mallorca ya no es lo que era.

-Teníamos un paraíso terrenal y, ahora, si queremos enseñarselo a nuestros hijos sólo podemos hacerlo con fotos porque lo hemos destrozado todo con tanto humo y urbanización.

-¿Se considera un ecologista?

-Estoy muy concienciado y hay una muestra de ello en unos diez de mis discos, donde suele haber una canción reivindicativa sobre como tendría que ser Mallorca.