Imagen del emplazamiento de la feria MIDEM, en Cannes, que se clausuró ayer. Foto: REUTERS

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ANA LARGO / AGENCIAS

El número de personas que descarga música por internet en España crece casi al ritmo de la población española. Si en el país somos más de 46 millones de habitantes, que siete millones de ellos lo hagan es una cifra trágica para la industria si añadimos que el 93% lo hace de forma ilegal y el 3, gratuitamente. Y es que sólo el 4% pasa por caja antes de hacer clic en 'descargar'.

Estos datos se dieron a conocer ayer en la clausura del MIDEM, en Cannes, por el Centro de Investigación del Mercado de Entretenimiento y la Cultura (CIMEC). Qué mejor escaparate que la feria más importante del mundo sobre la industria musical, en la que Balears ha estado presente, para denunciar el liderazgo de España y Francia en el ránking global de descargas ilegales de música por internet.

La delegación balear trasladada a Cannes, especialmente los representantes de las discográficas, ha pedido que «haya una regulación legal de las descargas que permita poner fin a la piratería». Miquel Àngel Sancho, de Blau Discmedi, explicó que desde la web de Blau se pueden descargar, de forma legal, hasta 2.000 canciones de los grupos que representan. Por su parte, Miquel Brunet, de Ona Digital, puntualizó que ellos ofrecen la posibilidad de comprar on-line los discos de la compañía y destacó que también ve «necesaria una inversión en educación para concienciar a la población de que la descarga ilegal es un delito que hace mucho daño a la industria». Al respecto, Sancho sostuvo que, «de continuar la tendencia actual de descargas por internet sin control, entre un 20 y un 30% de las discográficas pequeñas tendrán que cerrar».

El vacío legal y las dificultades para poner fin a la piratería en España parecen para muchos una excusa para mantenerse impávidos. «¿El Gobierno actúa? ¿Está haciendo algo?», preguntó la directora del MIDEM, Dominique Leguern. «Si los políticos no se implican, [la situación] no va a cambiar», puntualizó.

Lo cierto es que, por el momento, el 19'7% de la población española reconoce haber descargado música por Internet en los últimos tres meses y, entre el segundo semestre de 2007 y el primero de 2008, se produjeron casi 1.900 millones de descargas de canciones y 250 millones de películas, según el CIMEC. La descarga de música y contenidos audiovisuales es un fenómeno cada vez más popular y se ha incrementado un 44% en el caso de la música y un 60% en el audiovisual, respecto a 2006.

Aunque los caminos a seguir son muchos e inciertos, Francia se ha puesto manos a la obra. «El Gobierno francés va a discutir una ley en el Parlamento en febrero para proteger la industria», dijo Leguern. «Sobre las descargas, si lo hacen ilegal se les alertará y recibirán una carta, y si continúan se les multará y si siguen se les cortará el acceso a internet», recalcó.

Los baleares han aplaudido la legislación que está preparando Francia en este sentido.

«Si millones de personas pagan 1, 2 ó 5 euros por escuchar música al mes, es bueno para la industria», afirmó Leguern. ¿Se imaginan el poderío de la industria si los siete millones de españoles que descargan archivos musicales o audiovisuales también lo hicieran?