La dirección general de Cultura está estudiando la posibilidad de modificar el contrato entre el Govern y la Posada de Biniatró, impulsada por Bartolomé Beltran. La decisión del anterior equipo de gobierno de incrementar en un 60 por ciento el alquiler mensual del centro cultural, pasando de 5.000 a 8.500 euros, según la conselleria, ha hecho que los nuevos responsables estén estudiando la viabilidad de introducir modificaciones en el contrato.
El nuevo contrato se aprobó durante el último Consell de Govern de la anterior legislatura y tiene una duración de un año. «El incremento nos parece inapropiado y excesivo», aseguraron ayer desde la conselleria de Cultura. Por eso, los responsables han puesto en manos del servicio jurídico el contrato para, así, determinar qué modificaciones se pueden aplicar. Desde el Govern se aseguró que la intención «no es cerrar la casa museo», sino renegociar las condiciones.
Para Bartolomé Beltran, el alquiler de la casa está tasado en 14.000 euros. Cuando llegó el momento de renegociar el contrato, se plantó y pidió un aumento para compensar el perder tanto dinero. «No puedo regalar la casa, supone un sacrificio porque, además, tengo que pagar casi todos los gastos».
La dirección general de Cultura comparte los gastos de la Posada de Biniatró con el Ajuntament de Campanet y Sa Nostra. El Govern se encarga del alquiler y del coordinador. «Queremos dinamizar el centro y hacer que el resto de instituciones se impliquen más y formen parte de la gestión del espacio cultural», dijeron las mencionadas fuentes. El aumento del alquiler se justificó para poder realizar cambios en el mobiliario del espacio de Campanet.
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