TW
0

EFE|BARCELONA

Unos 81.000 «entregados» fans saludaron en la noche del domingo, en el estadio del Nou Camp de Barcelona, al rey Bono y su séquito de U2 en el concierto más multitudinario de la gira mundial «Vertigo 2005» del grupo irlandés de presentación de su último disco, «How to dismantle an atomic bomb».

Bono, con sus inconfundibles gafas de sol y vestido de negro con galones rojos, dio el pistoletazo de salida con la frase con la que empieza todos los conciertos de la gira: «uno, dos, tres...catorce». Todo en esta gira es enorme, 30 camiones articulados, un escenario de grandes dimensiones con dos pasarelas laterales que se abrazan sobre el público y...81.000 bocas que corearon todas las canciones con el actual rey Midas del rock, Bono, el cantante de las buenas causas. Entre los avatares del concierto, la Policía y la Guardia Urbana de Barcelona incautaron 1.380 camisetas falsas de la banda en las inmediaciones del estadio, detuvieron a tres personas e imputaron a otras 10 para tomarles declaración.