Fachada del Cuartel de Intendencia, ubicado en el carrer Socors, en plena Gerreria.

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El ejecutivo del Pacte de Progrés destinó parte de los ingresos de la ecotasa a la adquisición o recuperación de fincas y edificios con carácter propio. Se trataba de una «cruzada» para salvaguardar bienes patrimoniales de importancia y otorgarles un uso público que estuviese, por norma, vinculado a la promoción turística y cultural de Baleares. A cargo de la ecotasa se realizaron al menos 36 proyectos, en las cuatro islas, de diferente calado. En Mallorca, generalmente se llevó a cabo la compra de construcciones ya deterioradas por el tiempo o sin provecho económico, pero de importancia histórica. Así, se puede comenzar un listado del que la finca de Son Real, el Cuartel de Intendencia y los casales de Can Serra o Can Fàbregues fueron, o han sido después, algunos de los casos más sonados.

El retorno de los populares al Govern supuso la supresión del impuesto turístico. Con esta decisión, algunos de los proyectos previstos con los fondos de la ecotasa pasaron a depender del nuevo Institut d'Estratègia Turística. El organismo, con Carles Pizà como gerente, dará salida a los principales proyectos. Ahora bien, las ideas del Pacte para los futuros usos de estos bienes patrimoniales, en la mayoría de casos, han sido modificados por los populares. Can Serra no será reconvertido en un Museu d'Arts Decoratives. El futuro de este edificio de Sa Gerreria es el más incierto, debido a que por delante todavía quedan unos cuatro años de obras para consolidar y restaurar la construcción, pero la idea es que esté ligado a la artesanía y a los oficios. De momento, según informó Carles Pizà, está a punto de firmarse un convenio con el área de Historia del Arte de la UIB para que los alumnos puedan realizar prácticas supervisadas en el casal. Por su parte, Can Fàbregues, ubicado al lado de Sant Francesc, tampoco será un museo sobre la historia antigua de las Balears, sino que se convertirá en un edificio de usos administrativos. De este modo, la planta baja se convertirá en la sede central de las rutas culturales que Turisme ha puesto en marcha en Palma: «La ciutat i la mar», «La ruta dels convents»...

El proyecto del Cuartel de Intendencia, situado en la calle Socors, sí que de momento mantiene su planteamiento inicial. Así, será rehabilitado y cedido a Cort para que gestione un centro de investigación sobre diseño y artes tradicionales. Por último, la finca de Son Real, en el municipio de Santa Margalida, se convertirá en un itinerario cultural y etnológico. Además, bajo la dirección del Patronat de Races Autòctones de Mallorca (PRAM), se creará una exhibición permanente de las principales especies animales autóctonas. Estos nuevos proyectos están en vías de ver la luz a corto o medio plazo. Actualmente, están en marcha los proyectos de rehabilitación y parte de la financiación asegurada. Una vez puestos en marcha sus futuros usos, para la venta de su oferta dentro del circuito turístico, Carles Pizà apunta que se utilizaría el programa Targeta Verda, que comercializa también la nueva fundación Balears Sostenible, dirigida por Pau Collado.