Una obra de teatro gestual abrió la madrugada del miércoles la
participación isleña en la XXIII Fira de Tàrrega. «Adios Nonino»,
de A Cel Obert, fue la primera en pasar la criba de los más de 800
programadores que participan en el certamen, que este año cuenta
con 107 compañías y durante el que se podrán ver 116 espectáculos.
Entre ellos, «La contínua», de Mariantònia Oliver; «Mara», de Res
de Res; «Nit de Reis», de Rafel Oliver Produccions; «Viatge
Inmòbil», de Trócola; «Las aventuras de Tras-to», de Teatres
Públics Illes Balears; y «Adios Nonino».
El Espai Illes Balears acogerá la representación de tres de las
piezas. En esta ocasión, la carpa es más grande a petición de dos
de las compañías, Res de Res y Rafel Oliver Produccions. «Sus
montajes requieren una altura determinada, lo que ha significado
que la carpa gane en dimensiones y en plazas respecto a otros
años», dijo Catalina Sureda, directora general de Cultura del
Govern. Sureda y Francesc Fiol, conseller de Cultura del Govern,
asistieron ayer a la inauguración del Espai. «Tàrrega es una cita
obligada para el teatro balear», dijo Sureda. Para la directora
general, «Balears tiene un excelente nivel teatral que debe
exportarse al resto del mundo». Las seis compañías son «un muy buen
ejemplo» de la calidad y permiten ver «diferentes maneras isleñas
de crear».
«Adiós Nonino» es un claro ejemplo del teatro conceptual hecho
en Balears. La obra se vio en el Institut de Batxillerat, un
espacio concertado por la empresa Accés Teatre y que también
acogerá «Las aventuras de Tras-to». Para los cuatro actores y el
músico que protagonizan «Adios Nonino», la representación fue
«bien» a pesar de ser «en la jornada inaugural y a la 1.30 de la
madrugada», un día y una hora poco propicios a tener un público muy
numeroso. «El comentario general de la gente a la salida fue que le
había gustado», dijo Silvia Sánchez, miembro del grupo.
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