Con la presencia en el Festival de Robert de Niro y de otros
actores que ruedan en Málaga «El puente de San Luis Rey», quedaban
unidos los dos acontecimientos que han convertido en los últimos
días a la capital malagueña en una pequeña meca del cine, por cuyas
calles no era difícil encontrar a artistas y técnicos del
sector.
En la gala, presentada por Ariadna Gil y el argentino Darío
Grandinetti, los mayores aplausos se produjeron en el momento de
ser entregadas la Biznaga de Oro a «Torremolinos 73» y las Biznagas
de Plata a Pablo Berger como mejor director y a sus actores Javier
Cámara y Candela Peña como mejores interpretaciones masculina y
femenina. Berger confesó que se sentía «en el séptimo cielo»,
aunque con «Torremolinos 73» cree que «jugábamos en casa», y el
productor, Tomás Cimadevilla, destacó al Festival de Málaga como
«la mejor iniciativa, junto a los Goya, para que el cine español
atraiga al público y a los medios de comunicación».
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