La exposición nació como la manera idónea de pagar una deuda,
contraída en el pasado pero que, en la actualidad, cobra
importancia. El arquitecto Rafael Moneo inauguró ayer la muestra
«Rafael Moneo. De la Fundació a la Catedral de L.A.». Por la mañana
presentó la colectiva en el Col·legi Oficial d'Arquitectes de les
Illes Balears y, por la tarde, en la Fundació Pilar i Joan Miró,
donde ofreció una conferencia sobre su obra.
«Estoy en deuda con la fundació porque el trabajo con el que
estoy más empeñado en la actualidad, la catedral de Los Àngeles,
tiene su origen en Mallorca, más exactamente en el centro
cultural», aseguró Moneo. El arquitecto definió la exposición como
un recorrido por su universo realizada durante «los noventa».
«Asusta pensar en un encuentro bajo el mismo techo de unas obras
que, cuando uno las ve, parece olvidarse del esfuerzo y la
dedicación que hay detrás suyo», afirmó Moneo.
Las piezas presentes en la exposición, entre las que destacan
las maquetas del Kursaal de San Sebastián, la del Auditori de
Música de Barcelona o la de la futura ampliación del Museo del
Prado de Madrid, «están viviendo su propia vida», según el
arquitecto. «Pertenecen más a las ciudades que a mi mismo»,
explicó. La sensación de contemplarlas recuerdan a Moneo «el paso
del tiempo». «Me hace pensar en cómo será, a partir de ahora, el
sesgo de mi trabajo».
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