Para hablar de sexo no se necesitan palabras. Suelen bastar
cuerpos, que es lo que recogen los 27 cuadros que forman la
exposición SEX, inaugurada ayer en la galera Cuníum de Inca. La
exposición incluye cuadros de Víctor Borisov, Toni Dionis, Joan
Lacomba, Pere Reus y Eduard Vich.
Cada uno de ellos plasma de manera diversa su visión particular
del sexo, y todos consiguen a través de las obras expuestas
connotar erotismo, al igual que las palabras Manos, Fuego, Boca,
Carne, Juego o Cuerpo... los sustantivos que sirven de título a los
poemas con los que el joven poeta hinque Lluís Maicas complementa
la exposición. «La textura de la carn/ el sabor de la suor dins la
boca/ l'orgull d'una erecció, que cerca solc a on allitar-se...».
Maicas consigue con su pluma lo que los pintores ya han conseguido
a través del pincel: hablar de sexo, sin pecar de ordinariez.
«No todos los artistas se prestan a realizar este tipo de
obras», manifestó la organizadora de la exposición, Maria Payeras,
consciente de la dificultad que entraña enfrentarse de manera
directa y sin tapujos a un temática paradójicamente tan cotidiana
como tabú. «Me reuní con los artistas y entre todos decidimos
apostar por el erotismo. Luego cada uno de ellos lo abordó como
quiso», añade Payeras. El resultado: pincelas, trazos que definen
caricias, cuerpos, posturas, bocas, fuego... Sobre sexo, como sobre
gustos y colores, no hay nada escrito.
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