Después de casi medio año de restauración, el órgano parroquial de
Sant Pere de Sencelles volverá a sonar. Será el próximo sábado. Un
concierto de Montserrat Torrent reinaugurará un instrumento que
cuenta con 254 años de historia, obra de Mateu Bosc. Anton Llauradó
y Klaus Fischer han sido los encargados de recomponer las tripas
del vetusto instrumento. El pasado 28 de febrero iniciaron la
restauración, que no concluirá hasta horas antes de iniciarse el
concierto del sábado. Cualquier mínimo detalle ha de estar
supervisado, ya que una labor de tantos meses puede verse
inutilizada por un despiste.
La última rehabilitación que el órgano sufrió, en 1995, mostró
defectos a los pocos meses de efectuarse. Por ello, en esta ocasión
la parroquia ha contado con una comisión que se ha encargado del
seguimiento del proceso de reparación. Según apunta Klaus Fischer,
«se ha tenido que reparar en profundidad. El órgano tiene 1.280
tubos y el 95 por ciento de ellos se han rehecho; además, hemos
quitado añadidos y maderas mal puestas. Todo ello se ha vuelto a
fabricar con métodos completamente artesanales».
El instrumento conserva los elementos sonoros originales, con
los que fue creado en 1746, pero el teclado y el secreto (pieza que
se encarga de distribuir el aire a los tubos) son nuevos. Los tubos
repuestos se han elaborado con aleaciones de estaño y plomo del
mismo grosor que las originales, y las pieles han sido curtidas
como antaño, con clavos de forja. 11 horas de trabajo diario han
permitido resucitar un instrumento con más de dos siglos y medio de
vida. El año Bach podrá contar así con unas notas que viajarán a la
época del genio alemán. El sábado, Montserrat Torrent tendrá el
honor de volver a sacar de su interior la música barroca. La magia
del sonido producido por el aire recorrerá de nuevo Sencelles.
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