TW
0

El galerista Josep Maria Costa Gispert, que fue durante muchos años director de las Galeries Costa de Palma, falleció el pasado jueves víctima de una larga enfermedad que en los últimos años le había obligado a vivir postrado en una silla de ruedas.

Costa había nacido en 1910 en la localidad barcelonesa de Centelles. Hijo de Josep Costa Ferrer «Picarol» (Eivissa 1876 - Cala d'Or Santanyí 1971) estuvo desde siempre vinculado al mundo del arte a través de las Galeries Costa, que su padre fundó en 1928. Posteriormente heredó y dirigió este centro, situado en el edificio que fue la sede del diario «La Almudaina», en la calle Conquistador.

Josep Maria Costa era un gran amante del arte. En una entrevista realizada al diario «Baleares» hacía unas declaraciones que demostraban su amor al arte y contrastaban con su profesión de galerista. Allí aseguraba: «Si quieres saber una verdad muy íntima te diré que lo que más me duele es vender un cuadro. Los cuadros no tendrían que venderse... En último caso tendrían que cederse por amor, o por otra causa puramente sentimental».

Costa fue uno de los impulsores del Museu Municipal de Valldemossa, donde se expuso la colección Costa hasta 1992, cuando se remodeló el centro. Además de poseer pintura, este galerista tenía también un importantísimo fondo documental, en el cual había cartas de los artistas que habían pasado por la galería y numerosos libros. Todo este fondo fue donado a la Biblioteca March. Costa era tan minucioso que, al donar estos libros, utilizaba el siguiente sistema: daba 50 libros y hasta que no se habían catalogado todos ellos, no entregaba otros 50.

Como galerista, fue la persona que lanzó al pintor Joaquim Torrens Lladó. Con su obra, se reinauguró en 1989 la galería después de permanecer cerrada desde 1976.