La consejera de Salud y Consumo, Catalina García, en el Pleno del Parlamento andaluz. | ROCÍO RUZ/EUROPA PRESS

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La consejera de Salud y Consumo, Catalina García (PP-A), ha defendido este jueves la actuación «clara y transparente» del Gobierno andaluz tras conocer, «por los medios de comunicación», la «posible contratación» del exviceconsejero de Salud, Miguel Ángel Guzmán, por parte de la aseguradora privada Asisa, que «no se llegó a efectuar» finalmente al declarar la Junta la incompatibilidad del también exgerente del Servicio Andaluz de Salud (SAS) para asumir dicha responsabilidad antes de finales del próximo mes de julio.

En la sesión de control al Gobierno andaluz en el Pleno del Parlamento, la consejera de Salud se ha pronunciado sobre este caso al hilo de una pregunta que le ha formulado la diputada del PSOE-A Irene García, que ha pedido a Catalina García que valorara dicha contratación de Miguel Ángel Guzmán por parte de la citada aseguradora privada.

La consejera ha respondido que, «cuando tuvimos conocimiento de esa posible contratación que no se llegó a efectuar, se hizo un informe por parte de la Secretaría General de Función Pública» con el que «se declaró que era incompatible» el fichaje de Guzmán por Asisa, y el exviceconsejero «no hizo ese contrato».

Irene García le ha replicado que «lo que ha ocurrido es muy grave», porque afecta a quien era el «número dos» de la Consejería de Salud, «el que estaba en la sala de máquinas» de dicho departamento, y ha acusado a Catalina García de estar «cumpliendo a rajatabla» el «modelo» del presidente de la Junta, Juanma Moreno, consistente en derivar «dinero público» a la sanidad privada.

Además, la parlamentaria socialista ha aseverado que constituye «una falta de ética absoluta» el que una persona «que, desde lo público, da dinero público a empresas privadas, termina trabajando en esa empresa privada».

La consejera ha replicado a la también vicepresidenta segunda de la Mesa del Parlamento que ella se enteró de la contratación del exviceconsejero en Asisa «a través de los medios de comunicación», y fue entonces cuando desde la Junta se actuó.

Además, ha dicho que se alegra de que los socialistas «hayan crecido y sigan creciendo en ética y moral», y al respecto ha aseverado que hasta «256 altos cargos del Ministerio han pasado a la privada antes de cumplir el periodo de incompatibilidad».

De igual modo, la consejera ha incidido en la idea que traslada el actual Gobierno andaluz acerca de que la Ley de incompatibilidades de altos cargos de Andalucía es «muy mejorable», y la Junta se plantea reformarla y «mejorarla», desde la premisa de que «pensamos que a la pública tiene que venir gente también de la privada», y viceversa, y ha concluido pidiendo a los representantes socialistas que «crezcan en ética y en moralidad, pero de verdad, en serio, no de boquilla».

Petición de disculpas de la consejera por problemas sanitarios

Seguidamente, la también parlamentaria del PSOE-A María Márquez ha preguntado a la consejera por las movilizaciones del pasado domingo convocadas por la plataforma Marea Blanca que secundaron «miles de andaluces» en defensa de la sanidad pública en Andalucía, lo que ha dado pie a Catalina García para pedir «disculpas a todos los andaluces que cada día en el sistema sanitario tienen un problema que nosotros estamos obligados a resolver».

«A ellos les pido disculpas», ha sentenciado Catalina García, a quien María Márquez ha respondido que se «alegra» de que «haya cambiado de versión después de lo que dijo hace unos días cuando le preguntaron por las protestas que había en la calle», cuando «dijo que hay más profesionales que nunca, más dinero que nunca y que los profesionales sanitarios están mejor pagados que nunca» en Andalucía, le ha reprochado.

La también portavoz adjunta del Grupo Socialista ha animado a la consejera a «pedir perdón y reconocer que no está gestionando bien la sanidad pública, porque son muchos los problemas que tiene la gente», y ha insistido en acusarle de estar siguiendo «el manual» del PP consistente en «destrozar la sanidad pública, desviar dinero a la sanidad privada, que sus dirigentes se coloquen en las empresas a las que han llenado a dedo los bolsillos, mientras que los andaluces tienen que esperar 15 días para que un pediatra le vea al niño», o «más de un año para hacerse una prueba o poder operarse».

La consejera ha replicado a la parlamentaria socialista que ella pide «perdón muchas veces a los andaluces por los problemas que se puedan generar», tras lo que ha puesto de relieve que «en Andalucía se realizan cada día medio millón de actos sanitarios», y en un sistema con ese volumen de actuaciones está «claro que tiene que haber problemas».

La titular andaluza de Salud ha agregado además que ella es «muy respetuosa con las manifestaciones», y que ella se dedica a «trabajar por la sanidad pública de Andalucía», sobre la que reconoce que «tenemos mucho por hacer» y que «hay muchos problemas».

«Pero nunca voy a dejar de decir que tenemos más profesionales que en el año 2018, que están mejor retribuidos» que entonces, o que el Gobierno de Juanma Moreno ha invertido «2.000 millones en casi 2.000 intervenciones arquitectónicas» en el ámbito de la sanidad, y que «el sistema sanitario público andaluz hoy tiene más y mejores recursos que en el pasado», porque «el dato mata al relato», ha apostillado la consejera.

Finalmente, Catalina García ha sostenido que «los de la privada eran» los socialistas cuando gobernaban la Junta, y lo que van a dedicarse desde el Gobierno del PP-A es a «revertir» lo que ellos «hicieron», ha zanjado la consejera.