En declaraciones a la Cadena Cope, recogidas por Europa Press, Moreno ha explicado este miércoles que ese artículo lo que hace es adaptar la Ley Forestal de Andalucía a la estatal, que es menos restrictiva incluso. «Lo que hemos hecho es adaptar el marco autonómico al marco estatal», ha indicado Moreno, quien ha precisado que ese «pequeño párrafo» del decreto de simplificación es el objeto de la «disputa» con el Gobierno central.
Lo que se recoge en el citado artículo es para «el conjunto de Andalucía», según ha apuntado Moreno, quien ha explicado que la «disputa» radica en que la administración central entiende que se puede dar la circunstancia de que agricultores de la corona norte de Doñana, pasada, por ejemplo, una década puedan volver a cultivar productos agrícolas en unos suelos que en este momento tienen un uso forestal, con plantaciones de chopos o eucaliptos.
Se ha mostrado seguro de que en la reunión que mañana mantendrá con Ribera en el Palacio de San Telmo se va a «subsanar» esa situación. «Si para resolver un problema en Doñana o a los agricultores y ganaderos, tengo que sentarme cien veces con la señora Ribera o con quien sea, me sentaré para buscar una solución», ha sentenciado.
Se ha mostrado convencido de que mañana se llegará a un acuerdo en el cual «entendamos ambas administraciones cuál ha sido el motivo de la modificación, que básicamente es una armonización normativa entre el ámbito autonómico y el estatal».
Ha indicado que los anteriores gobiernos del PSOE-A en Andalucía fueron «excesivamente restrictivos en el ámbito medioambiental», lo que ha creado un problema «de desarrollo económico y social y de porvenir para muchos ciudadanos y muchos rincones de Andalucía».
De otro lado, Moreno ha confiado en que también se llegue a un acuerdo «lo más amplio, razonable y equitativo posible» en relación con las ayudas a los municipios de la corona norte de Doñana, a la vista de que hay un debate intenso «hasta tal punto que ha habido alcaldes que no están de acuerdo y están dispuestos a no firmar el documento» que Gobierno y Junta pusieron sobre la mesa.
El presidente ha recalcado que el parque de Doñana tiene que tener «un equilibrio en términos de desarrollo económico y de porvenir para los municipios de su alrededor». «Y los parques tienen que tener apoyo social, y ese apoyo social sólo se consigue metiendo recursos y diversificando», ha indicado el presidente, para quien a través del acuerdo por Doñana entre su Gobierno y el Ejecutivo nacional se ha dado «una alternativa a los agricultores que necesitan construirse un porvenir y desarrollarse».
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