Víctor Iglesias, consejero delegado de Ibercaja: "Buscaremos una fórmula para estar en el proyecto de La Romareda"

Víctor Iglesias ha explicado, en un 'Desayuno Heraldo' recogido por Europa Press, que el impulso por parte de Ibercaja de un proyecto como el nuevo estadio de fútbol está condicionado al cumplimiento de una serie de «requisitos», exigidos en iniciativas en las que ha participado en el pasado en Aragón, como la llegada de General Motors a Figueruelas, la Expo 2008 o Aramón.

En primer lugar, debe ser una propuesta «estratégica y tractora para el desarrollo económico y social» del territorio; por otro lado, que tenga «viabilidad y se sostenga financieramente por sí solo»; y en tercer lugar, «una gestión profesional y ortodoxa».

Por tanto, ha aclarado, que si Ibercaja se implica en el proyecto de La Romareda será porque se cumplen estas condiciones. En la actualidad, ha precisado Iglesias, «no hay duda de que es estratégico para la ciudad de Zaragoza», puesto que contar con este equipamiento deportivo también permitirá atraer otro tipo de eventos culturales y de ocio.

No obstante, todavía se está estudiando por parte de la entidad bancaria que sea una propuesta que financiera sostenible por sí sola, para lo cual se está trabajando «codo con codo» con «altos cargos» del Ayuntamiento de Zaragoza «en una línea de trabajo que funciona muy bien para lograr una total convicción por nuestra parte».

«Tenemos total disponibilidad y cariño hacia el proyecto, por lo que seguro que buscaremos la fórmula para que Ibercaja pueda estar en él y ayude a impulsarlo», ha afirmado Víctor Iglesias. Sin embargo, no ha precisado cuál sería la fórmula de participación en caso de dar el paso: en el accionariado o como operador financiero.

«No nos decantamos por una ni por otra, sino que será la que en el momento determinado sea la más conveniente, tanto para el proyecto como para Ibercaja. Si se cumplen los tres requisitos, seremos flexibles», ha apuntado.

"momento dulce" en la economía aragonesa

Por otro lado, Iglesias se ha referido a la marcha de la economía aragonesa. Ha considerado que, en la actualidad, atraviesa «un momento dulce» gracias a «un importante flujo de inversiones productivas» de diferentes sectores que han llegado al territorio en los últimos años. «Ojalá pueda venir la ansiada fábrica de baterías», ha apostillado.

Ha considerado que esta situación no es coyuntural, sino que hay ventajas competitivas en Aragón que son «estructurales»: la ubicación, las infraestructuras de transporte, recursos naturales, costes de instalación y salariales competitivos y la formación, destacando la «calidad» de la Universidad de Zaragoza, así como la Universidad San Jorge.

A todo ello se suma una «estabilidad» social y política «envidiable» y un «manto de consenso y diálogo» en el ámbito laboral. En este sentido, ha aconsejado «vender» más Aragón fuera, cuando haya ocasión de hacerlo, para atraer más proyectos a la comunidad, así como promover «medidas localistas» para que las empresas ya instaladas en la región disfruten de ventajas.

Con respecto al nuevo Ejecutivo autonómico, el consejero delegado de Ibercaja ha subrayado que «están muy centrados», impulsando iniciativas estratégicas necesarias para Aragón y ha deseado que se mantengan así durante el resto de la legislatura.

Aramón y la unión de estaciones

Iglesias ha opinado que el carácter estratégico que tiene el proyecto Aramón para las comarcas pirenaicas es «rotundo e incontestable», puesto que ha sido «un motor clarísimo» de dinamización de actividad económica en la zona y fijación de población y seguirá siéndolo.

«En Ibercaja, estamos muy orgullosos de haber apostado, a través de las inversiones necesarias, junto al Gobierno de Aragón, para que este proyecto se llevará hacia delante», ha manifestado.

Las estaciones del Pirineo aragonés, especialmente Formigal, ya son destinos de referencia para el público nacional, ha remarcado, pero la competencia para mantenerse como atractivo a nivel nacional y europeo «se complica» si no se avanza, de manera que la unión entre las estaciones de Astún, Candanchú y Formigal «es una magnífica iniciativa» para ayudar a permanecer en el foco del turismo de nieve.

Sin duda, Ibercaja «lo respaldaría y ayudaría», ya que sería «más que conveniente», aunque siempre respetando la normativa medioambiental en vigor. «Que se haga es muy bueno para seguir impulsando el sector de la nieve y lo que significa para esas comarcas del Pirineo», ha estimado.

«Aramón tiene potencial para contribuir al desarrollo económico de la zona y fijación de población, pero es necesario invertir, algo que respaldamos desde Ibercaja y desde el Gobierno de Aragón», ha expresado, al tiempo que ha reclamado «apoyo social», porque este proyecto «estratégico» para el territorio «se lo merece».