«He mantenido una conversación con el delegado (Francisco Martín) hace apenas unos minutos. La política de inmigración no puede ser recibir al Aquarius con los brazos abiertos y desperdigar a los inmigrantes, sin apenas información por toda España», ha afirmado el alcalde en rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno.
Además, ha informado de que los inmigrantes que han llegado están en hostales porque se tardará aproximadamente 10 o 15 días en acondicionar las instalaciones militares que hay en Carabanchel.
En concreto, el Gobierno va a habilitar dos alojamientos en Carabanchel y Alcalá de Henares, en Madrid, para alojar a migrantes procedentes de Canarias, según han confirmado a Europa Press fuentes del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. Así, se instalarán campamentos en terrenos de Defensa situados en al acuartelamiento General Arteaga del Ejército de Tierra y en Alcalá de Henares.
El alcalde ha reprochado el discurso del presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, con la llegada de inmigrantes en el Aquarius, mientras reparte a los inmigrantes por la Península. Asimismo, ha criticado que la información debería ser «más completa» y se debería informar de cuáles son las infraestructuras necesarias, el horizonte temporal y sus condiciones sanitarias.
Por ello, le han pedido a Delegación de Gobierno un reporte diario de la situación de los inmigrantes que están llegando a la ciudad de Madrid porque «será mejor prevenir que tener que adoptar otro tipo de medidas».
Sánchez, "primero la foto y luego los problemas"
«La política de inmigración es una política de Estado, que lo que no puede ser es que empiece por el Aquarius y acabe siendo mandados los inmigrantes a cualquier punto de España tal y como lo está haciendo este gobierno. Como en tantas cosas, ya sabemos cómo funciona Pedro Sánchez. Primero la foto y luego ya los problemas», ha censurado.
Considera el alcalde que para evitar debates públicas que se puedan generar en relación con la inmigración hay que valorar «las mejores condiciones para garantizar la convivencia y la seguridad en la ciudad».
«La política no se trata de ser un buenista sino de ser bueno y por tanto que lo que hay que hacer es buena política y no política buenista y saber que puede haber determinados problemas, y que esos problemas lo que tenemos que hacer es sencillamente afrontarlos tanto para los inmigrantes como para los vecinos de la ciudad», ha defendido el regidor.
Hasta el momento, ha precisado que el Ayuntamiento no ha asumido ningún coste por la llegada de inmigrantes y que es el Gobierno de España el que los está asumiendo.
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