Juicio por el crimen de Isaac López | Europa Press - EUROPA PRESS

TW
0

La Fiscalía de Madrid ha mantenido en el juicio que se celebra por el asesinato de Isaac López Triano la solicitud de prisión permanente revisable para el asesino confeso al considerar que la prueba practicada acredita la gravedad del crimen ocurrido la tarde del 14 de julio de 2021 en un túnel del barrio madrileño de Pacífico.

El juicio contra David Bárcena ha quedado esta mañana visto para sentencia con la última palabra del acusado. En ese momento, ha reiterado su petición de perdón a la familia del fallecido, sobre todo a su madre.

«Pido perdón a mi familia, que también la he destrozado. Si me lo permiten, cumpliré una condena que sea justa y no por venganza. Prometo reparar el daño que he hecho», ha subrayado.

En la sesión, las partes han expuesto sus informes finales y la fiscal ha negado que haya recibido instrucciones políticas para pedir la prisión revisable.

La representante del Ministerio Público y las acusaciones, la que ejerce la familia del chico y CERMI, solicitan que se le condene por un delito de asesinato con la agravante de pertenencia a organización criminal, lo que acarrea una prisión permanente. La defensa reclama que se le pene por un delito de homicidio a cuatro años de cárcel con las circunstancias atenuantes de confesión tardía, reparación del daño, arrebato y adicción a las sustancias.

«No hay duda de cómo se produjeron los hechos», ha subrayado la representante del Ministerio Público en el inicio de sus conclusiones definitivas citando la declaración en sala del instructor del atestado policial. El responsable de la investigación detalló que se llegó a los agresores al analizar los datos de los usuarios de los patinetes que alquilaron esa tarde para salir a la 'caza'.

Con esta información, los investigadores del Grupo VI de Homicidios llegaron a la identificación de Bárcena y del resto de los agresores, condenados ya por un juzgado de menores. Además, las localizaciones de las antenas GPS les situaron a todos ellos en el lugar del crimen.

También se ha referido a la declaración de los testigos, que corroboraron la tesis de que Isaac fue perseguido por la calle de Méndez Álvaro de la capital hasta que le dieron alcance en la mitad del túnel. Al tratar de saltar una valla, se cayó y el grupo le agredió conjuntamente cuando se encontraba boca abajo en el suelo.

El atacante le apuñaló en el tórax y las heridas, de una profundidad considerada, le perforaron los dos pulmones y la aorta, según certificaron los médicos forenses en la prueba pericial. El chico murió en el acto. «La víctima no pudo reaccionar a las heridas. Fue una agresión conjunta, buscaban la muerte y se aseguraron de ella. No fue una lucha de igual a igual. Estaba absolutamente indefenso sin posibilidad de defensa», ha aseverado.

Miembro de los ddp

También considera la fiscal probada la pertenencia del procesado a la banda de los Dominican Dont Play por las identificaciones realizadas por la Policía junto a miembros probados de la organización. Además, recuerda que el día del entierro en el cementerio de La Almudena, David se presentó en los alrededores con veinte personas integrantes de la banda, según confirmó la Policía.

«Creían que era trinitario y por eso le mataron. El trastorno de Asperger que sufría no se le notaba», ha señalado la fiscal por lo que cree que no ha quedado acreditado que los autores conocieran esa discapacidad.

Se opone a que se aprecie la confesión tardía dado que cuando la Policía le detuvo en su domicilio de Villaverde ya había pruebas de que era el autor material de las puñaladas. De igual modo, rechaza que estuviera intoxicado por el consumo de cannabis a la vista de la velocidad en la que iban con los patinetes, un extremo acreditado por las grabaciones de las cámaras de seguridad.

La fiscal ha recordado que los menores ya condenados mintieron en la sala, por lo que solicitó que se les investigue por un delito de falso testimonio en el plenario. «Mintieron en la sala para defender a un miembro de su coro», ha recalcado.

Ha defendido que se debe aplicar por ley una pena de prisión permanente revisable por la gravedad de los hechos sin que esto sea una cadena perpetua y ha negado que haya recibido instrucciones políticas, tal y como se ha llegado a insinuar. Insiste en que «ni en la instrucción ni en la fase de calificaciones ni en el juicio ha recibido instrucciones de su superiores jerárquicos».

«Si se aplican los cuatro años que pide la defensa, estará en la calle. Hay que ser objetivos y considerar los hechos probados sin odio y sin afecto. El acusado tiene toda la vida por delante e Isaac no la tiene», ha concluido.

No se busca venganza

El abogado Juan Manuel Medina se ha adherido a lo dicho por la fiscal si bien difiere respecto a la apreciación de la agravante de delito de odio en el asesinato. «Nadie busca venganza sino Justicia, que significa aplicar la ley conforme a unos hechos que se consideran probados», ha dicho.

Subraya que tampoco se busca «una sentencia ejemplarizante», se busca «cierta pedagogía se busca que no haya más David Bárcena, que no haya más Isaac, que no haya mas familias destrozadas». «Ninguna de las familias tendrían que estar aquí y lo están por David Bárcena», ha apostillado.

El letrado ha recalcado que el acusado ha mentido al tribunal al manifestar que no conocía a su víctima, ya que lo manifestó en instrucción y dijo que le conocía del mundo de la música. «Y dijo que le tenía tirria», ha agregado rechazando que no cuenta la verdad al señalar que había consumido alcohol y drogas.

Insiste en que los agresores sabían que tenía una discapacidad porque era «vox populi», ya que era una persona conocida en el mundo del rap y estaba preparando un disco. «Era una persona vulnerable y le daban desde pequeño porque era diferente», ha dicho.

Juan Manuel Medina ha hecho hincapié en que «no solo le mataron al pensar que era trinitario sino que se jactaron de hacerlo porque lo publicaron en vídeos, donde el encausado aparecía junto a integrantes destacados de la banda latina».

En su turno, la defensa que ejerce el letrado Álvaro Rojo ha defendido que el crimen fue un homicidio y ha insistido al jurado popular que no pretenden exculpar al acusado, recalcando que no está probada la vinculación del crimen con la actividad de las bandas latinas.

En su informe, ha acusado a la Brigada Provincial de Información de crear «una ficción» entorno a las bandas latinas y ha censurado que a su cliente se le ponga casi como si fuera «Satanás» y a la víctima como «santo».