Archivo - Rafael Gomar, párraco de Santa Cecilia de València | AVAN - Archivo

TW
0

Dos grupos de valencianos, entre los que se encuentran el sacerdote delegado de Cáritas Valencia e Instituciones Caritativas y Sociales y el párroco de Santa Cecilia de València, están a la espera de poder regresar desde Tierra Santa, donde se han visto sorprendidos por el ataque masivo lanzado por el movimiento islamista Hamás el sábado.

Jose María Taberner, sacerdote delegado de Cáritas Valencia e Instituciones Caritativas y Sociales, ha anunciado que algunos de ellos, en principio, vuelven vía Estambul (Turquía) unos a Madrid y otros a Barcelona.

«Estamos en contacto con la embajada española porque en vista de que las aerolíneas que nos trajeron, y muchas otras, no quieren viajar al aeropuerto de Tel Aviv, el Gobierno se está haciendo cargo de enviar aviones militares que nos repatríen a los que estamos en Israel», ha indicado el sacerdote.

Según Taberner, les han comunicado que estén «preparados y con la maleta hecha porque en cualquier momento nos pueden decir que nos vamos con el autobús al aeropuerto, donde nos repatriarían con los aviones del Ejército».

«Esto es lo que sabemos de momento, eso adelantaría la salida. El Arzobispo de Valencia, monseñor Enrique Benavent está en contacto permanente para conocer nuestra situación», ha indicado.

José María Taberner viajó con un grupo de 36 personas de la parroquia San Pascual Bailón de València. «Salimos el día 5 y llegamos el mismo día por la tarde y así nos mantuvimos los primeros días en Galilea, en la parte norte de Tierra Santa, pero ante la noticia de la guerra el sábado, todo se complica y nos encontramos aquí con que empezaron las prohibiciones de viajar, de caminar por la calle, el peligro, los atentados posibles, y entonces, cuanto menos tentemos a la suerte mejor», ha detallado.

En esta línea, ha expresado su deseo de poder «volver pronto, sanos y salvos. La situación es delicada y la tensión es muy importante aquí. Aquí todo se dice 'sotto voce', la gente desconfía unos de otros y la situación es bastante delicada» ya que el aeropuerto «lo abren, lo cierran, las compañías aéreas tienen miedo y así estamos».

Oyendo aviones militares

«De momento podemos decir que estamos bien y tratando de que se resuelva todo lo más pronto posible», ha incidido. «Ahora aquí no hay bombas, no oímos disparos, estamos un poco lejos del norte donde está combatiéndose con la frontera del Líbano, y bastante lejos del sur, de la franja de Gaza, y de las poblaciones limítrofes. Estamos en Galilea, en Nazareth, estamos bien, pero hemos estado oyendo aviones militares de día y de noche, porque van hacia el Líbano donde hay combate en la frontera. En el lugar donde estamos se observa preocupación por cómo vamos a volver».

Por su parte, Rafael Gomar, párroco de Santa Cecilia de València, que viajó en grupo junto a 28 personas, ha afirmado que el sábado, cuando cruzaron la frontera por el norte de Israel a Jordania, se enteraron de que había comenzado la guerra «y no pudimos ingresar en Israel».

«Vamos a regresar a València vía Estambul. Hoy 10 de octubre, estamos esperando que nos recoja el autobús para ir al aeropuerto. Una parte del grupo viajará a Barcelona y otro a Madrid. Agradecemos la preocupación que ha tenido el arzobispo monseñor Benavent por conocer cómo es nuestro estado, preocupándose por el grupo».