Mitma formaliza un contrato de conservación de carreteras del Estado en la provincia de Teruel por 16 millones de euros

En concreto, se actuará sobre 222 kilómetros de carreteras, de las que 82 km son de autovías, repartidos en varios tramos de las vías A-23, N-223, N-223A, N-234, N-234A, N-330, N-420 y N-420A --sector nº 1--.

La duración de este contrato es de 3 años, con posibilidad de una prórroga por otros 2 años y otra adicional con carácter excepcional de 9 meses, y se ha enmarcado en el programa de conservación y explotación de Mitma, que permite mantener la vialidad en la Red de Carreteras del Estado (RCE) para que sea accesible en adecuadas condiciones para toda la sociedad.

Actuaciones de mejora vial

El nuevo modelo de contratos de servicios para la ejecución de operaciones de conservación y explotación en la RCE persigue ofrecer un servicio integral de movilidad al usuario, mejorar el estado de la carretera y red, y optimizar los recursos públicos.

Asimismo, en algunos contratos se incorporan proyectos específicos de pequeñas obras necesarias para mejorar la funcionalidad de la vía. En este contrato se incluyen las mejoras en el término municipal de Teruel del drenaje del paso inferior del kilómetro 121,730 de la A-23; o de la Seguridad Vial en la intersección entre la N-234 y la A-1512, km 128,600.

Entre estas actuaciones también se ha incluido la mejora de la seguridad vial mediante la adecuación de los márgenes en varios tramos de la N-330, km 277,700 al 279,500.

Actuaciones generales

Entre las actuaciones generales que incluyen los contratos, se encuentran los trabajos de ayuda a la vialidad y conservación ordinaria para que la carretera y sus elementos funcionales dispongan de las mejores condiciones de seguridad posibles.

Para ello se incluirá la vigilancia y la atención de accidentes e incidentes; la vialidad invernal; el servicio de control de túneles y comunicaciones; el mantenimiento de instalaciones; el establecimiento de inventarios y reconocimiento del estado de la vía; la ayuda a explotación y estudios de seguridad vial; y el mantenimiento de los elementos de la carretera con adecuados niveles de calidad.

Con este nuevo modelo se refuerza, además, la orientación hacia los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) con los que el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana se ha comprometido.