El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha confiado en que haya un acuerdo entre diferentes fuerzas políticas en Ripoll (Girona), que debería aglutinar a Junts, ERC, CUP y PSC, que evite que gobierne Aliança Catalana, partido ganador en las municipales del 28M.
«Las posiciones extremas, especialmente de extrema derecha, hay que detenerlas en todas partes. Hay una mayoría democrática de los representantes electos de Ripoll que puede hacerlo posible. Espero que pueda haber un acuerdo entre estas fuerzas que permita que la extrema derecha no gobierne», ha destacado en un rueda de prensa en la Generalitat tras anunciar los tres nuevos consellers del Govern.
La presidenta de Junts, Laura Borràs, manifestó el domingo que no es «partidaria» de un pacto entre Junts, ERC, CUP y PSC en el municipio para evitar que gobierne Aliança Catalana, lo que provocó críticas a Borràs.
Para Aragonès, si en el Parlament no han dejado espacio «a la extrema derecha, porque hay una mayoría democrática que así lo quería, también hay que hacerlo a nivel municipal».
Según el presidente de la Generalitat, la extrema derecha es enemiga de la cohesión social «y un país que quiere ser libre debe ser un país cohesionado».
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