Lo hace tras el escrito presentado por la Asociación Nacional para la Protección y el Bienestar de los Animales (Anpba) ante la Delegación Territorial de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural en Jaén, según ha informado este martes el citado colectivo en un comunicado remitido a Europa Press.
En concreto, solicitó «el inicio de una investigación y comprobación suficientes de los presuntos hechos», de modo que la autoridad competente, en el uso de sus potestades administrativas, determinara si este uso de palomos en un festejo se ajusta o no a Ley 11/2003 de Protección Animal de Andalucía.
En su escrito, Anpba señalaba que el artículo 4 de esta norma prohíbe someter a los animales a la realización de comportamientos impropios de su condición y a tratos antinaturales y que su artículo 38 tipifica como infracción muy grave el uso de animales en eventos en los que puedan ser objeto de sufrimientos o tratos antinaturales.
Ahora, la Delegación Territorial ha notificado a la asociación que, tras estudiar la documentación remitida, 'procedería la incoación de expediente sancionador al responsable de los hechos', motivo por el que, finalmente, 'se ha incoado procedimiento sancionador' a una cofradía de la localidad 'por presunta infracción administrativa en materia de protección de los animales'.
Anpba ha subrayado que, al interponer esta denuncia, pretende «promover y obtener una garantía legal suficiente a los efectos de que no se utilicen aves de carne y hueso (palomos) en la Fiesta de la Candelaria de Alcalá la Real».
«Como han determinado los tribunales, y entre ellos la relevante sentencia de la Audiencia Provincial de Palma fechada el 3 de noviembre de 2022, la reciente modificación del Código Civil ha venido a establecer el 'importante principio' de que los animales no pueden ser seguir siendo considerados como cosas o bienes y que este principio 'ha de presidir la interpretación de todo el ordenamiento' jurídico», ha señalado.
Al hilo, desde la asociación se ha pedido «que los palomos de carne y hueso sean sustituidos por otros simbólicos, de atrezo, que podrían ser de cerámica, yeso, arcilla u otros materiales reciclados y de elaboración artesanal». Algo que, a su juicio, «mantendría el espíritu del festejo pero sin utilizar animales vivos, evitando así que puedan sufrir estrés, ansiedad, miedo y otros estados psíquicos negativos».
La festividad alcalaína de la Candelaria tiene lugar el 2 de febrero y en ella «se procesiona a la Virgen de las Mercedes, se le ofrece pichones disfrazados al antojo popular y tartas de merengue que posteriormente se reparten entre los asistentes», según recoge la web de Turismo Alcalá la Real.
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