La magistrada y ex vicepresidenta del Consejo de Estado, María Teresa Fernández de la Vega, en una imagen de archivo | Eduardo Parra - Europa Press

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Compromís rechaza que «el ecosistema corrupto del PP haya salpicado a otros partidos», después de que la Guardia Civil haya concluido que varios empresarios pagaron gastos de campaña de candidatas socialistas en 2007 y 2008, mientras Unides Podem insta al PSPV a «mirarse un poco al espejo» y apostar por «su regeneración interna».

Así han valorado los diputados autonómicos Carles Esteve y Ferran Martínez, respectivamente, el informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil que concluye que empresarios pagaron gastos de 'merchandising' de la campaña de Carmen Alborch para las elecciones municipales de 2007, en las que encabezó la lista por València, y de la que fuera vicepresidenta del Gobierno Mª Teresa Fernández de la Vega cuando fue la candidata al Congreso por Valencia en los comicios de 2008.

Este informe se incluye en la pieza separada 7 del caso Azud, sobre la que se ha levantado el secreto de sumario. En este procedimiento, en la pieza principal, con más de medio centenar de investigados, se investigan presuntas 'mordidas' a cambio de adjudicaciones de obra pública por parte de empresas adjudicatarias durante la etapa de Rita Barberá como alcaldesa de València.

Como portavoz adjunto de Compromís en Les Corts, Esteve ha reconocido que a su coalición -gobierna junto al PSPV en la Generalitat y en el Ayuntamiento de València- le «preocupa» este caso de presunta corrupción, como cualquier otro.

«Continuaremos luchando contra la corrupción venga de donde venga, en el gobierno y en la oposición y sea el nombre que sea», ha recalcado, y ha lamentado que a finales de 2022 sigan trascendiendo casos de «aquel ecosistema corrupto del Partido Popular».

Preguntado por las relaciones entre alguno de los investigados, como el exresponsable de finanzas del PSPV Pepe Cataluña, y representantes del actual Consell, se ha limitado a insistir en que su coalición no tendrá «ninguna duda» en seguir combatiendo la corrupción afecte a quien afecte, porque ha garantizado que para eso entraron a gobernar en 2015.

La «diferencia», ha remarcado, es el comportamiento de los partidos a la hora de actuar cuando uno de sus integrantes se ve salpicado en un caso así, ya que ve diferente un «ecosistema corrupto» con que «una persona corrupta haga trampas» dentro de una formación política. «Si un partido ha de tomar medidas respecto a personas relacionadas con la corrupción lo tiene que hacer desde el principio», ha subrayado.

En la misma línea, el portavoz adjunto de UP ha señalado que este informe revela lo que pasaba en «los peores años de la corrupción del PP», cuando «los corruptos no solo compraban al partido del gobierno, sino al principal partido que estaba entonces en la oposición».

"pp y pspv iban dopados a elecciones"

«No solo compraban la voluntad de los gobiernos, también los silencios de determinados sectores de la oposición», ha denunciado, lo que a su juicio puede explicar «por qué el PP estuvo tantos años gobernando» y demuestra que «PP y PSPV concurrían dopados a las elecciones». Por eso ha instado a los socialistas a «ver lo que queda de todo esto».

Cuestionado por el papel de cargos socialistas actuales en este proceso, ha remarcado que no es ni fiscal ni juez ni abogado como el exsíndic socialista Manolo Mata y ha proclamado: «Todos tenemos la garantía de que en ocho años de gobierno del Botànic no ha salido a la luz ningún caso corr como en la época del PP».

El diputado 'morado' ha garantizado que «nunca» estarían dispuestos a admitirlo, ni en el seno de UP ni en el tripartito, y ha descartado que «haya que poner la mano en el fuego» ni por los socialistas ni por nadie porque, al igual que sostiene Compromís, lo importante es «la manera en la que un partido responde y cómo depura responsabilidades para que no vuelva a ocurrir». «Por eso es importante que el PSPV lo haga», ha insistido.