Los embalses vascos están al 57,5% de su capacidad de llenado, casi 40 puntos por debajo del 94% de reservas que marcaban hace exactamente un año, cuando una suma de precipitaciones, unidas al deshielo producido por el ascenso de las temperaturas, elevó rápidamente la lámina de agua de los ríos, provocando importantes inundaciones las cuencas de Bizkaia y de Álava el 9 de diciembre de 2021, que se extendieron al día siguiente a las cuencas de Gipuzkoa.
Además, el desembalse de la presa de Ullibarri mantuvo el nivel de inundación aguas abajo del río Zadorra hasta el día 13 de diciembre del pasado año.
Aunque la comparativa esté mediatizada porque en las mismas fechas del pasado año se registró un record de lluvias en Euskadi, los 145 hm3 de agua acumulados a fecha de hoy están también 41 hm3 por debajo de la media de la última década, fijada en el 74% de llenado, según datos del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.
El pantano alavés de Ullibarri (el de mayor capacidad de Euskadi con 146 hm3) recoge 85 hectómetros cúbicos, por lo que se encuentra al 58,2% de su capacidad total. Por su parte, las reservas del embalse de Urrunaga (el segundo en dimensión con 72 hm3 de capacidad) ascienden a 40 hectómetros cúbicos, lo que representa el 55,5% de su capacidad.
El embalse de Ibai Eder, en Gipuzkoa, está al 63,6% de su capacidad total de 11 hm3. En este mismo territorio histórico, el pantano de Urkulu --con 10 hectómetros cúbicos de capacidad-- tiene embalsado el 60% del agua que puede acoger.
Ibiur, también en Gipuzkoa, recoge el 62,5% de su capacidad total de 8 hm3. Por último, el embalse de Albina, en Álava, permanece al 40 por ciento, al mantener embalsados 2 hectómetros cúbicos de agua.
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