Las portavoces de Más Madrid, Rita Maestre y Mónica García, en el Plenario de la formación | BRUNO THEVENIN (MÁS MADRID)

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La portavoz de Más Madrid en la Asamblea, Mónica García, que detecta nervios en el PP por la respuesta ciudadana ante la sanidad pública, quiere presidir la Comunidad para hacerse cargo de los problemas «de los nadie, de los cualquiera, también de los que han votado a (Isabel Díaz) Ayuso y verán en su centro de salud una tablet».

La parlamentaria, con unos pendientes con el logo de Más Madrid, ha propuesto un acuerdo a la presidenta regional, si la manifestación por la sanidad pública de este domingo 'pincha', si solo es secundada «por cuatro gatos» inducidos por la diputada, ella no volverá a hablar de la sanidad en el Parlamento autonómico y retirará la reprobación del consejero Enrique Ruiz Escudero pero, sin embargo, si la cita es masivamente seguida y transversal la 'popular' deberá «asumir su responsabilidad política».

«Y que se vaya, que coja cualquiera de las puertas giratorias que ha construido en pandemia», ha lanzado Mónica García desde el Círculo de Bellas Artes, donde Más Madrid ha celebrado su Plenario bajo el lema 'La fuerza de Madrid', un encuentro «con las gentes majas que militan y pertenecen al lobby del bien común, de los que quieren poner la política como herramienta transformadora frente a la chapuza, el caos y el desgobierno de Ayuso y del alcalde, José Luis Martínez-Almeida».

El de mañana será un "día histórico"

Mónica García intuye que el de mañana será «un día histórico» en el que la ciudadanía plantará cara al «desguace del bienestar» que el PP lleva en su ADN. «Tienen la sanidad patas arriba», ha reprochado. «Los que nos ha traído al desastre no nos va a sacar de él», ha advertido.

También ha cuestionado las palabras de Ayuso en las que vincula la huelga sanitaria con el activismo político, «como si la política es algo que hacen otros». «Es como si un juez le dice a otro que deje de judicializar, ¿no? La suya es política de intrigas palaciegas entre Sol y Génova», ha lanzado, después de defender que la política que hacen en Más Madrid es la del «cuidado de la vida». «Decía Beltroch Bert que eran unos analfabetos políticos quienes no entienden que el precio del pan depende de la política», ha apostillado.

"el futuro, la vida y la salud es política y nos están robando todo"

«Que tengas una tablet en el centro de salud depende de la política y más cuando parece que ahora explorar a un paciente es comunismo. El futuro, la vida y la salud es política y nos están robando todo», ha arengado Mónica García ante un auditorio que ha coreado 'sanidad pública' durante varios momentos de su intervención.

Mañana ella acudirá a una «manifestación política» y ha puesto de relieve el orgullo por unos compañeros sanitarios que han ido a la huelga, a una «huelga política». Ante la militancia de Más Madrid, Mónica García ha vaticinado que, como hace diez años en la 'Marea blanca', «habrá gente muy diferente, como en una sala de espera, el mejor lugar de mestizaje», porque todos son «iguales ante un fonendo».

"veremos carteles de 'yo voté a ayuso' y esa es nuestra gente"

«Todos somos uno de los cualquiera, de los proles. Mañana esto no irá de izquierdas o de derechas. Podremos ver carteles de 'Yo voté a Ayuso' y esa es nuestra gente. También por esa gente hacemos política, porque militamos en el 'nosotros', ellos en el 'yo'», ha defendido ante el Plenario.

Mónica García ha defendido que en «el 'nosotros' caben todos». «Militamos en el futuro pero (en el PP) necesitan un 'ellos' al que demonizar, necesitan criminalizar el disenso, quieren hacer creer que hay alguien peor que quien da Telepizza a los niños vulnerables o lleva la sanidad al desguace», ha dibujado.

La jefa de la oposición en la Asamblea ve a Ayuso «nerviosa» cuando ha comprobado «que la mayor preocupación de los madrileños, por encima de inflación, es la sanidad pública». «Queremos presidir la Comunidad para hacernos cargo de los problemas y de las soluciones. De los nadie, de los cualquiera, porque nos ponemos en piel de la gente, militamos en la empatía. Nos queremos hacer cargo de todos y todas, también de los que han votado a Ayuso y verán en su centro de salud una tablet», se ha comprometido.

Frente al "desbarre"

Por eso ha propuesto que cuando la 'popular' salga con un «Nicaragua, el cambio climático es comunismo y un sello de Correos es comunismo», en definitiva, «cuando desbarre» para «tapar sus chapuzas» y «buscar casito», se le conteste «con tres palabras: ya no cuela». «Cuando diga Nicaragua, nosotros decimos urgencias; cuando diga Sánchez, nosotros decimos urgencias; cuando diga comunismo, nosotros le decimos urgencias», ha planteado.

A seis meses de las elecciones, Mónica García ha remarcado que Más Madrid ha pasado de ser la oposición a una alternativa real con su política «a escala humana, a ras de la gente» frente a lo que hacen otros con su «ombliguismo hablando de sí mismos». «Nosotros plantamos cara al PP con la cabeza alta y sin retroceder un milímetro, con las propuestas sobre las necesidades y problemas de la vida normal de la gente», ha descrito.

Más Madrid ha demostrado en este tiempo que «la política es una herramienta fundamental, alegre, divertida, transformadora de la realidad para que la vida duela menos. Ayuso y Almeida nos querían con los brazos caídos y estamos con la cabeza alta».

«Si Almeida está muy preocupado por el 'muera la inteligencia', Rita (Maestre) está preocupada por la ciudad de los quince minutos, por la gente, por los barrios, por que el Metro llegue a El Cañaveral. Si Ayuso está preocupada por los sellos del PCE, yo lo estoy por las urgencias de Atención Primaria y por la transición ecológica», ha contrastado.

García ha querido poner de relieve que les «falta un paso para pasar de ser oposición a alternativa, para ser mayoría social». Más Madrid lo quiere conseguir haciendo «política del derecho al tiempo, del derecho a soñar, a tener salarios dignos».

Quedan seis meses para elecciones, un tiempo que cree que a Ayuso se le va a hacer «muy largo», no así a Más Madrid con su «trabajo de hormiguita para conseguir una ciudad y una Comunidad más limpia, verde y feminista». «Tenemos hambre de victoria, de bien común, de sanidad pública y hambre de Más Madrid», ha concluido.