Una mujer ha sido detenida por insultar y amenazar de muerte a una médica del centro de salud de Portada Alta, en Málaga capital, mientras estaba siendo atendida. A la llegada de los agentes, la paciente también se enfrentó a ellos.
Estos hechos, que sucedieron el pasado viernes, han sido denunciados este miércoles por CCOO Málaga y el Sindicato Médico de Málaga (SMM) que han reunido a facultativos y compañeros de la víctima a las puertas del centro de salud en repulsa por estos hechos.
Como han detallado en un comunicado, la paciente llegó la mañana del pasado viernes a la consulta del centro de atención primaria por motivos que se desconocen y comenzó a insultar y a amenazar de muerte a la médica que le atendió.
Esta paciente, que ya es conocida por protagonizar otros casos de violencia en este y otros centros de salud de la capital, se enfrentó a los agentes de la Policía que se personaron en el lugar, a los que también amenazó.
Por estos hechos, la mujer fue detenida y pasó la noche en el calabozo de la comisaría. El juicio rápido que estaba previsto para el sábado ha tenido que ser aplazado al próximo 9 de noviembre debido a problemas informáticos en la sede judicial.
Ante esto, el Sindicato Médico ha insistido en la «execrable escalada de violencia contra la figura del facultativo» y ha alertado de que «si no se toman medidas contundentes tenderá a normalizarse esta situación, en una provincia como la malagueña donde se acumulan los mayores índices de casos de toda Andalucía». Asimismo, el SMM exige a la administración andaluza extender a todos los centros de salud la presencia de vigilantes de seguridad.
Desde CCOO, el responsable de Atención Primaria del Sindicato de Sanidad y Sectores Sociosanitarios del sindicato en la provincia, Félix Sáenz, ha lamentado que estos hechos «se llevan repitiendo de una forma sistemática y con el inicio de la pandemia aumentó exponencialmente». De hecho, en el primer semestre de este año, en el distrito Málaga-Guadalhorce se ha producido 60 agresiones entre personal sanitario y no sanitario, seis de ellas físicas, ha relatado.
Sáenz ha señalado que la Atención Primaria «necesita una profunda reforma que no está abordando la Administración» y que pasa por que el SAS «debe cumplir los protocolos que se pactaron en cuanto a agresiones, debe liderar esta cuestión y dejar la Atención Primaria abierta al usuario».
Y es que considera que, aunque estos hechos son «injustificables», «que no se den citas y las listas de espera estén yendo a más de diez/doce días, de alguna forma todo esto está contribuyendo a un aumento en la violencia a los profesionales sanitarios».
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