Carmen Calvo (dcha.) habla con Antonio Deza, en presencia de Carmen Victoria Campos (centro). | Europa Press

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La ex vicepresidenta del Gobierno Carmen Calvo (PSOE) se ha reivindicado este miércoles en Córdoba como «la primera ministra de toda Europa que salió con la bandera del orgullo, y ahí seguimos», a la vez que ha recordado que ella ha luchado «por la dignidad de los colectivos Lgtbi de toda la vida».

En declaraciones a los periodistas, Calvo, actual presidenta de la Comisión de Igualdad en el Congreso de los Diputados, ha reaccionado así al ser preguntada sobre la proyectada Ley Trans, dada la demora que sufrirá en su tramitación parlamentaria, cuestión ésta que ha llevado a solicitar su baja del PSOE a la ex diputada socialista en la Asamblea de Madrid y activista transexual, Carla Antonelli.

Calvo ha atendido a los periodistas en la Agrupación Poniente Sur del PSOE en Córdoba capital poco antes de ofrecer a militantes socialistas una ponencia sobre 'Memoria Democrática' y, a este respecto, ha afirmado que «nadie entiende que a las derechas españolas, a diferencia de las derechas europeas, que han apostado por la justicia y porque el pasado esté definitivamente resuelto, todavía les sigue incomodando la democracia», precisando, además, que «al PP le sigue incomodando la memoria, tal vez porque ellos no quieren saber de dónde vienen».

En este sentido, Calvo ha asegurado que, mientras a los populares les molesta la democracia, los socialistas tienen «todavía a muchos compañeros fusilados, en fosas y sin identificar», y «ese es el honor del PSOE y ese es el honor que nosotros tenemos que restaurar».

Calvo ha recordado que ella «estaba en el Gobierno del presidente Zapatero cuando se hizo la primera Ley» de Memoria, «y me ha tocado ser la hacedora de la segunda Ley de Memoria Democrática que hemos hecho los socialistas en este país», la cual «significa no tener desaparecidos, significa dignidad para todas las víctimas de este país, significa respeto a sus familias y a las asociaciones de memoria que se han ido moviendo a lo largo de 40 años, y significa reparación del silencio tan doloroso en el que ha vivido mucha gente sabiendo que tenía enterrados y sin identificar a sus abuelos, a su madre o su padre. Eso es dignidad democrática».

Por tanto, según ha argumentado, «la dignidad de la democracia española no puede seguir estando en cuestionamiento con todos estos asuntos por resolver», y hacerlo en base a los principios de «reparación, justicia y búsqueda de la verdad», lo que implicará que «se van a abrir archivos y que vamos a averiguar muchas cosas que todavía» no han quedado expuestas a la «luz».

«En ese sentido, creo que vamos a hacer verdad las palabras de Azaña: no puede haber paz sin justicia, no puede haber justicia sin verdad, y no podíamos seguir de esta manera», de ahí la necesidad de la nueva Ley de Memoria Democrática, «y el orgullo enorme los socialistas» es que han hecho posibles dos leyes de Memoria, una «que abrió» el camino, y segunda «va a cerrar muchas cuestiones que quedan todavía pendientes».

Así, Calvo, que ha estado acompañada por el presidente de la asociación memorialista cordobesa 'Dejadnos llorar', Antonio Deza, y por la secretaria general de la Agrupación Poniente Sur del PSOE en Córdoba capital, Carmen Victoria Campos, ha reconocido que «queda mucho camino y muy largo», señalando la necesidad de «apostar por el Banco de ADN», pues «son muchos desaparecidos a los que hay que identificar con escrupulosidad y enterrarlos con dignidad».